Quién no conoce en Ceuta a Estrella Heredia, o Estrellita, como se le llama con cariño. Porque esta pequeña gran luchadora ha estado 21 años ofreciendo la suerte en forma de cupón por las calles de la ciudad y defendiendo los derechos laborales de los trabajadores de la ONCE en el sindicato. Ahora a Estrella le toca descansar, le toca tener tiempo para “salir”, “tomarse un café con los amigos” y “disfrutar de la familia”, explica. Porque Estrella ya se ha jubilado de su trabajo y, a medias, de su labor defendiendo desde el sindicato CCOO los derechos de sus compañeros.
Y es que, aunque esta semana sus colegas de lucha le rendían un pequeño homenaje en la sede sindical de unas siglas a las que ha estado muchos años apegada, Heredia confiesa a El Faro que, ya jubilada, “seguiré ayudando en lo que pueda” porque dejar de ser de CCOO es difícil. Su esfuerzo, lucha y perseverancia han sido valorados por sus compañeros que la califican de todo un “referente”. Estrella, humilde, solo sabe agradecer tanto ese cariño como el que le brinda mucha gente en Ceuta.
Vecina del Mixto, ahora tendrá que empezar una nueva rutina, aprender a vivir un día a día diferente del de recorrer las calles vendiendo los cupones de la suerte y charlando con todos los que le paraban, que eran muchos. El pasado 2 de abril recibió el típico SMS de la Seguridad Social que le comunicaba su prejubilación a los 56 años; esta semana CCOO le ha despedido en un acto íntimo lleno de cariño. Durante 15 años ha estado defendiendo los intereses de sus compañeros como delegada sindical. Toda una vida luchando:
“Ya me toca descansar”, explica. Los días de recorridos por las calles pesan mucho. Hiciera frío o calor ahí estaba Estrella, Estrellita, con los cupones de la ONCE. “Ahora estaré con la familia, descansando un poco”, detalla. De su trabajo nada malo puede decir: “Me ha gustado mucho, he podido hablar con mucha gente... tengo una gran satisfacción”, confiesa, porque “he conocido a muchas personas” y he hecho grandes amigos, los mismos que ahora le felicitan por un descanso merecido tanto en el ámbito laboral como el sindical.
En 2013 a Estrella le reconocieron con el premio ‘Maite Alascio’, que ensalza la labor de las mujeres en Ceuta y que ella quiso dedicar a las discapacitadas y trabajadoras. No le faltan reconocimientos físicos que son incluso superados en una calle donde el cariño por Estrella es correspondido. En la ONCE entró a trabajar con 34 años, después de una vida vendiendo cupones de Cruz Roja. Pasó de contratos temporales a renovaciones por años hasta quedar fija, siempre yendo por las calles -ya que nunca ha tenido un puesto de venta- y deteniéndose en aquellos puntos en donde no le faltaban sus amistades a las que promete seguir viendo.
En aquella época se hacían contratos no solo a personas con discapacidad visual, por lo que Heredia pudo optar a esa inserción laboral. Esta gran mujer siempre ha luchado por salir adelante, por trabajar y dar un ejemplo de superación personal, luchando además como delegada de personal por los derechos de otros compañeros y la denuncia de las injusticias.
Le ha llegado el tiempo de plasmar esa lucha sindical y laboral en ella misma, viajando más para ver a sus familiares residentes en la Península y participando de muchos actos a los que en el día a día no podía acudir. En Comisiones ya se le echa de menos. Y mucho.
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