El Grupo Hoarce ha puesto en marcha la línea de transporte marítimo para la traída de áridos de Málaga a Ceuta ante el agotamiento de los recursos pétreos de la ciudad autónoma. El barco ‘Grinna’, de una compañía noruega, atracó ayer en el Muelle de la Puntilla con 2.500 toneladas de grava, que se descargaron antes de las seis de la tarde. Esta operación supone el comienzo de la traída de áridos ante el agotamiento de estos recursos en Ceuta.
A través de este sistema de transporte de material por mar se prevé que llegue a la ciudad un total de 200.000 toneladas anuales de recursos pétreos, una decisión que se ha visto obligada a tomar Hoarce ante el agotamiento de la cantera ‘El Cariño’.
“La sospechosa adjudicación directa, por el interés general de la Ciudad de Ceuta, de la cantera propiedad del Ministerio de Defensa, se ha convertido en un vergonzoso monopolio con un interés muy particulares”, manifestó el administrador general de Hoarce, Pedro Castillo.
Éste será el futuro de la llegada de áridos a la ciudad autónoma debido a que este material no se podrá traer de Marruecos al no contar Ceuta con aduana comercial. Así, se prevé que para 2011 los áridos que se comercialicen en Ceuta sean en su totalidad traídos de la península.
La empresa Hoarce ha optado por abrir esta línea marítima de transporte de áridos de Málaga a Ceuta como una apuesta por seguir vendiendo este material en la ciudad autónoma y continuar garantizando los 40 puestos de trabajo del Grupo.
La paralización del trabajo en esta empresa supondría un despido masivo y dificultaría la llegada de áridos a Ceuta, con el consecuente lastre para la economía ceutí.
Con este sistema el precio del árido se multiplicará por cuatro debido a que los gastos del transporte ocupan las tres cuartas partes del precio final. Sin embargo no se prevé que suba el precio de la vivienda ya que el hormigón supone el 7 por ciento de éste.
A pesar del hándicap con el que ahora se encuentra Hoarce y que en un futuro próximo será un gran problema para la ciudad, esta empresa ha optado por invertir y continuar con su actividad para abastecer de material a sus clientes y mantener el importante número de puestos de trabajo que tiene.
Una intensa jornada laboral
Además, en la intensa jornada laboral el Muelle Alfau recibió la visita de otros dos barcos, uno el Índalo, procedente de Carbonera y 1.500 toneladas de cemento para Hoarce.
El otro, el Thuro, perteneciente a la compañía mercantil marítima Calypso, propiedad del Grupo Hoarce, con 500 toneladas de material de construcción, lo que demuestra la fuerte apuesta de Hoarce por Ceuta.