La
hípica comenzó con un proyecto desde casi nada pero que a día de hoy tiene a más de 200 usuarios en las clases de la escuela. La Junta Directiva de la Federación de hípica de Ceuta se siente muy orgullosa de haber empezado esto pero sobre todo de decir con voz alta ahora “no hay quién nos pare”. Todo comenzó como una ilusión, con muchas ganas pero con mucho trabajo por delante. Poco a poco se fueron viendo los resultados y este pasado verano se llegó a un punto importante, “competir fuera y traernos importantes resultados”, así lo señala el presidente de la Federación de hípica, Alberto Romero. Durante todo el verano se han mantenido el nivel de clases en las escuelas deportivas del
Instituto Ceutí de Deportes y este fin de semana, sin descanso, volvieron a iniciarse los entrenos con las escuelas ya de verano. Más de 200 usuarios ya se ejercitan en las instalaciones del Centro Ecuestre, en las tres modalidades: Nivel iniciación, nivel medio y nivel de perfeccionamiento. Alberto Romero junto a su Junta Directiva tomó las riendas hace varios años y al principio todo fue más complicado, ahora la situación va sobre ruedas. Hay clases diarias, pero también clases durante los fines de semana, todo ajustado a cada jinete o amazona que quiere desplazarse. El proyecto era claro hacer de esta Federación, la que “fue hace muchos años”. Llevar a los caballos a competir fuera y tener grandes jinetes y amazonas en nuestra ciudad.
Todo se inició como un sueño y poco a poco, éste, se está convirtiendo en realidad. Ya son muchos los que están en las clases avanzadas y otros que ya han competido fuera obteniendo grandes resultados. Lo que tiene claro Alberto Romero es que ahora “esto no se puede parar. Hemos empezado y ya hay que ir a más”. Los primeros pasos de la escuela de equitación no fueron los más sencillos pero sí los más importantes. De casi nada ahora hay un buen número de usuarios y sobre todo gente con muchas ganas de avanzar en este deporte. “La escuela se creó para enseñar equitación y nosotros hemos instaurado el no ponerle fin a este deporte. Hemos sacado a los alumnos a competir a la Península, con lo complicado que es sobre todo en cuanto a desplazamientos se refiere”, dijo el presidente de la Federación de hípica. Este año se seguirá compitiendo en diferentes campeonatos, ya hay uno fijado para el mes de octubre aunque aún está por determinar los jinetes o amazonas que tomarán parte. “Queremos mantener el nivel en estas pruebas y a ser posible llevar la bandera de Ceuta a un campeonato Nacional”, resalta Alberto Romero. El futuro está claro que “se nombre a Ceuta como se nombrara como se hacía hace años”. Lo más importante es la “diversión de los alumnos”, lo demás es secundario. La Federación tiene muy claro que no “hay que parar esta modalidad y no haya ninguna pared que le pueda. Si no le vemos fin a las posibilidades que le podemos ofrecer esto no va a parar nunca”. Las líneas marcadas son muy claras y tanto monitores como directiva, por supuesto alumnos es mantener viva la ‘llama’ de la equitación. Las escuelas deben tener usuarios y los caballos deben ser montados casi a diario. Por eso, en el Centro Ecuestre apenas hay descanso, ya que hay horarios de tarde de lunes a viernes y ya sábado y domingo, se entrenan tanto por la mañana como por la tarde. El objetivo es conseguir “diversión pero también buenos jinetes y amazonas”.
La preparación también es fundamental con “clases regladas aunque sea escuela. No nos podemos fijar a un alumno nada más, sino en bloque. Cuando salimos fuera hay que individualizar más”. A los caballos también se les prepara por la situación que va a venir en cada prueba. “Es un conjunto para enseñar tanto al jinete como al caballo”, agregó el presidente de la Federación. La equitación va seguir dando guerra cada semana pero también en las competiciones que se hagan en la Península. “Es una
bestia que no hay quién la pare. Así que hay que seguir manteniendo el espíritu muy vivo”.
Participa en la guía 'Ceuta te enseña'
Una de las actividades que suele tener la Federación durante todo el curso escolar va guiada precisamente a los escolares. Dentro de la guía ‘Ceuta te enseña’ son muchos los alumnos y alumnas de distintos centros educativos los que se acercan hasta las instalaciones del Centro Ecuestre de Ceuta para tomar buena cuenta de las instalaciones y los animales.
“Le enseñamos la equitación, el manejo de los caballos dentro de las posibilidades que ellos tienen por el tiempo de las clases. Todo ello guiado para que puedan tener un primer concepto de lo que es este deporte”, señala el presidente de la Federación de hípica. Es una de las actividades que suele mantenerse año tras año y que los diferentes colegios seleccionan para participar. La importancia de mantenerla y la necesidad de seguir aprendiendo hacen de estas clases, una pieza fundamental en cada trimestre de los centros educativos de la ciudad. El deporte cobra especial interés dentro de la guía ‘Ceuta te enseña’, ya que no solo la equitación es la que practican los escolares, sino también fútbol u otras. Es una oportunidad para tener de cerca a los caballos y poder ver ‘in situ’ las posibilidades que da esta modalidad deportiva. Además pueden interactuar con los animales de las instalaciones.
Clases guiadas de hipoterapia
El año pasado fueron 80 los alumnos que participaron en las clases de hipoterapia. La hipoterapia, equinoterapia o terapia asistida con caballos es una técnica empleada en niños, adolescentes y adultos a nivel neuromuscular, psicológico, cognitivo y social, por medio del caballo como herramienta terapéutica.
Consiste en aprovechar los principios terapéuticos del caballo para tratar a personas con discapacidades físicas, ya sean congénitas o adquirida. Se basa en aspectos como la transmisión del calor corporal del cuerpo del caballo a la persona, la de impulsos rítmicos y el movimiento tridimensional. Las sesiones son dirigidas por un fisioterapeuta. Los alumnos con necesidades especiales suelen tener este tipo de actividades y el año pasado ya tuvo un éxito rotundo. En el curso 2022-2023 se mantendrán y posiblemente podría aumentar el número de participantes. El año pasado, los alumnos/as y los monitores tuvieron un feeling especial y las sesiones fueron llevadas con gran “ilusión y ganas. Estas clases deben mantenerse todos los años, porque son necesarias”. La hipoterapia lleva con los caballos desde hace ya varios años, pero ahora se ha aumentado el número de horas para que puedan tener más éxito si cabe.