El secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, tras la reunión mantenida con trabajadores de las Brigadas Verdes, en la que también han participado varios miembros de la Dirección Política del Partido, como el secretario del Área de Empleo, Antonio Gil; el secretario del Área de Relaciones Institucionales, Antonio Ramírez; el secretario del Área de Barriadas, Juan Gutiérrez; así como el secretario ejecutivo Melchor León; ha valorado la misma como “positiva pero llena de incertidumbres ya que el futuro de las Brigadas Verdes se plantea complicado e inconcreto“. El partido ha explicado a través de una nota de prensa que los representantes de las Brigadas Verdes han subrayado que no entienden lo que está pasando y que no saben el futuro que les espera. Lamenta que esta situación les lleva a un continuo malestar ya que, cada año, no saben si seguirán o no realizando su trabajo. "Esta falta de estabilidad implica que padres de familias no sepan si van a tener ingresos para pagar los gastos del inicio del curso escolar de sus hijos, como son libros, material escolar, uniformes, etc. y poder tener una cierta tranquilidad económica”, añade. Hernández ha puesto el énfasis en la debilidad de la situación "ya que ni siquiera los trabajadores cuentan con un convenio colectivo, con lo que ello le perjudica en sus salarios", y afirma que “la indefensión en sus derechos laborales es evidente por lo que sus preocupaciones están más que justificadas”. "Los trabajadores ven cómo algunos de sus compañeros se van incorporando a la empresa municipal Obimace, sin conocer bien los criterios de por qué unos si y otros no, por lo que esa falta de transparencia pone en alerta a todos", añaden desde el PSOE de Ceuta. Hernández lamenta "que el Gobierno no remedie, de una vez por todas, la situación sobre el futuro laboral de las Brigadas Verdes", y en este sentido ha concluido argumentando que “el Gobierno del Partido Popular es el que debe dar una respuesta sobre los proyectos de vida de familias que dependen de un trabajo, y no dejar que los problemas se vayan dilatando en el tiempo hasta que llegue otra promesa incumplida de cara a las próximas elecciones autonómicas”.