Después de meses en silencio, la empresa
Hércules Servicios Generales de Integración ha ofrecido en Ceuta su versión de los hechos ante el conflicto laboral por el que están pasando sus trabajadores. El lugar elegido para ofrecer esta rueda de prensa ha sido el Hotel Parador Las Murallas de Ceuta, donde Francisco Javier Martín, administrador único de la entidad local, ha expresado que, “durante todo este tiempo nos hemos sentido engañados, vilipendiados. Y, sobre todo, hay un daño moral y económico, que es el restablecimiento del equilibrio económico financiero de la empresa”. El foco se ha puesto, directamente, en la
Administración local, “la cual nos debe bastantes facturas”. Para justificar estas palabras, el propio Javier Martín ha ofrecido un dossier en el que se aprecia más de 40 extractos que suman hasta 50.000 euros. “El objetivo principal de esta rueda es que se me agilice los pagos porque estoy haciendo auténticos malabares para poder pagar a los trabajadores”, ha explicado el administrador. Como consecuencia de ello, “me han cortado la línea de Factoring por excederse de los 30 días de la fecha de factura”, ya que algunas datan de junio, julio o agosto. Esta línea permite anticipar el cobro de una factura, cediendo el crédito a la empresa financiera con el fin de obtener liquidez inmediata y despreocuparse de la gestión de cobro. “Una vez que la administración nos pague, ya se lo devolvemos nosotros”, ha matizado.
Presunta denuncia
Las víctimas directas de esta situación está en los trabajadores, que no ven a final de mes su sueldo.
En semanas anteriores se han concentrado a las puertas de sus respectivos trabajos para visibilizar este duro pesar acompañados de sindicatos. Este tema no se ha dejado atrás, sino que se ha puesto sobre la mesa y en boca del empresario ceutí. Según él, “hay una vertiente legal que no queda muy clara. Ellos pidieron a la autoridad laboral una solicitud de aprobación de dicha manifestación”· Al parecer, lo anterior “no quedaba claro cuál era el ente legal de esta
concentración, la misma entidad ni se la autorizó, por lo que esto no es ni una manifestación ni concentración”. Martín ha especificado que esto “fue una agrupación de trabajadores ocupando su horario de jornada laboral”. Así que, “lo estamos tramitando a través de nuestro departamento jurídico y de Recursos Humanos”, ha aseverado y, a continuación, ha lanzado la pregunta de: “¿Qué tipo de responsabilidad tiene ahí el trabajador?”.
“Mano negra”
El descontento de la empresa Hércules es evidente, pero aún más cuando se trata de sus trabajadores. Martín arremete que “detrás de estos hechos hay cierta mano negra por parte de otras empresas movidas por presuntos intereses políticos”. La pelota la lanza a otros tejados desconocidos, pero sí confirma que “mi empresa nunca va a ser partícipe de juegos de ninguna empresa, administración o sindicato. Nosotros nos movemos por licitaciones de carácter público”. Tras este listado de quejas, el “único” administrador de Hércules ha querido agradecer a la Unión General de Trabajadores (UGT), al secretario general del PSOE de Ceuta, Juan Gutiérrez; a la gerente del ICD y a Intervención y Tesorería de la Ciudad Autónoma.