Con un simple gesto se puede hacer algo grande. Tan grande como salvar una vida. Una donación de médula ósea supone una extracción de sangre, pero el desconocimiento, el temor derivado de una falta de información lleva a que sean muchos los que, hoy en día, recelen de dar ese paso.
La
guardia civil de Ceuta, Alicia Contreras, no solo nunca receló sino que además decidió que podía hacer algo más. Intentar convencer a los compañeros y compañeras de la Comandancia para que dieran ese paso y se hicieran donantes de médula. Pero no solo a ellos, sino también a familias y amigos.
“Soy donante hace bastantes años”, explica la agente Contreras a El Faro, “hay personas que no lo son, que ni se lo piensan solo por desconocimiento”. La lectura de un artículo en prensa que se refería a un proyecto llevado a cabo por la Facultad de Ciencias de la
Salud para captar donantes fue el revulsivo necesario para que esta integrante del Instituto Armado se pusiera manos a la obra. ¿Y por qué no en la Guardia Civil?, pensó. El coronel del Cuerpo dio el visto bueno a esta iniciativa solidaria que se enmarca dentro del programa guardias civiles comprometidos. Sanidad de la Comandancia informó a través de correo electrónico a todas las unidades para que se sumaran a la causa. El enfermero Ángel Quero también lo aprobó.
Y así, hasta 22 guardias civiles, familiares y amigos acudieron esta semana al Hospital Universitario para hacerse donantes de médula. Muchos de ellos padres o madres de familia con hijos pequeños, sensibilizados ante las historias de pacientes que requieren de esa donación para seguir teniendo vida. En el
HUCE recibieron una charla informativa, conociendo que este gesto digno de héroes “no es algo perjudicial, no es nada grave para el que dona”, explica Contreras. Estas 22 personas que atendieron esta iniciativa son a partir de ahora “22 esperanzas más de vida” para aquellos pacientes que buscan su donante compatible.
Esta iniciativa, gestada en el seno de la Benemérita, puede ser extrapolable a otros Cuerpos o instituciones que rompan la barrera psicológica del miedo, del desconocimiento, dando así un paso al frente en apoyo a las personas que en cualquier punto del país o de fuera de él puedan requerir de un trasplante en su vida. Se ha hecho algo grande pero puede ser mayor.
“Animaría a todo el mundo que sea sano a ser un héroe”
María Luisa Centeno es la coordinadora de trasplantes del Hospital Universitario de Ceuta, una defensora a ultranza de las donaciones de médula ósea. En lo que llevamos de año se han registrado 128 donaciones y el pasado fueron 180. “Esto quiere decir que llevamos más que a mitad del año pasado. Animaría a todo el mundo que sea sano, que tenga entre 18 y 40 años, con ganas de ser solidario, a ser un héroe y salvar una vida.
Una donación de medula ósea supone una extracción de sangre. Luego hay una extracción de la medula ósea (cuando eres elegido). El banco de donantes te llama y te preguntan por si quieres seguir siendo donante de medula ósea”, explica.
La coordinadora expone que “regalar vida es un regalo y no existe un regalo mejor en este mundo”, añade, haciendo hincapié y dejando “clarísimo” que “todo es gratis y cubierto por la Seguridad Social”.
Además de la edad (el límite está en los 40 años) en el caso de las embarazadas tampoco pueden ser donantes.
¿Qué procedimiento se sigue? El más habitual es el pinchazo en ambos brazos y en casos muy contados, un punción directa al hueso denominado pala iliaca. “El paciente en caso de pinchazo directo al hueso no tendrá dolor puesto que le ponen anestesia”, explica.
Hay muchos mitos en torno a las donaciones de médula, mucho desconocimiento y esto es precisamente lo que frena todavía a la sociedad para que den este paso tan importante, este paso determinante para los que necesitan trasplante, habiendo muchísimos niños afectados.
Por ejemplo “es absolutamente falso el mito de que por la punción del hueso te quedes paralítico. Es rotundamente falso esto. No te puedes quedar paralítico por este tipo de pinchazo en músculo y hueso (pala iliaca)”, añade.
La iniciativa desarrollada en la Guardia Civil tiene mucha más importancia que un reflejo en un artículo de prensa, porque no termina con el final de esta historia. Se ha dado un paso importante de cara a aquellas personas que puedan necesitar de una donación que puede, quién sabe, tener su origen en el gesto, en el paso adelante dado por estas 22 personas que quisieron dar el sí a una propuesta que, a buen seguro, continuará.