La Guardia Civil salva vidas en el mar: al límite en la frontera sur

Es mera cuestión de salvar vidas. Una vez más la historia se repite en la frontera sur. La Guardia Civil ha activado sus medios tanto en tierra como en mar para intervenir en situaciones complicadas ocurridas a lo largo de este sábado en Ceuta. Situaciones complicadas porque había gente en el agua, luchando contra el oleaje y un temporal que incongruentemente ‘anima’ a muchos a escapar de Marruecos a pesar de que se trata de una de las rutas más temerarias. Desde el viernes y durante el día de hoy, la Guardia Civil se ha entregado a sacar a adultos y menores del mar. No ha habido tanta presión como en otros periodos marcados por oleaje y lluvia, pero sí se han sufrido situaciones extremas en donde de no ser por intervenciones rápidas se estarían narrando tragedias.

Salvando vidas en el mar

Los integrantes del Servicio Marítimo, alertados desde el COS, acudían a los puntos en donde se encontraba gente en peligro para subirlos a la embarcación. Han sido varias las ocasiones en las que han tenido que socorrer a adultos, pero también menores de edad enfundados en trajes de neopreno, con aletas y, en algún caso, con flotadores de niños. Creen que eso les ayudará: elementos infantiles que se convierten en trampas porque no sirven siquiera para ayudarles a seguir nadando. Los agentes del Marítimo han estado sacando a gente del agua en servicios que, sobre todo, se han repetido en el Tarajal, ya que la mayor presión ha estado en esta zona en donde Marruecos no sacaba sus embarcaciones. Un panorama distinto al que se registraba meses atrás en el espigón que separa Beliones de Benzú, zona que hoy no ha tenido tanta presión. Cada día en la frontera sur es un milagro, sobre todo cuando se aprecian esas imágenes de grupos que se echan al mar sin miramiento en Marruecos. Ellos protagonizan los intentos que no aparecen en las estadísticas de Interior, de los que nunca se hablan, pero que reflejan la temeridad de esta zona.