Agentes de
la Guardia Civil del Servicio Marítimo de Ceuta han recuperado 9 fardos de
hachís que estaban fondeados en el mar, a la altura de
Calamocarro y Benzú, en concreto en la zonas de las tres piedras. Los componentes de esta unidad han sacado la droga que ha sido trasladada a las dependencias de la Compañía Fiscal para su posterior pesaje, alcanzando casi los 400 kilos (385 exactamente). Una vez llevadas a cabo estas labores se procede a su entrega al área de
Sanidad, dependiente de
la Delegación del Gobierno, encargada del análisis pertinente. Los fardos recuperados se encontraban fondeados cuando los agentes del Instituto Armado, que se encontraban de rastreo, supieron de su existencia y procedieron a sacar dicha mercancía. No hay detenidos y por tanto el servicio queda como un hallazgo de droga. El fondeo es una de las técnicas que usan las pequeñas redes dedicadas al tráfico de estupefacientes procedentes de
Marruecos. Pasan cantidades en embarcaciones desde el vecino país y luego esos fardos son fondeados en un lugar concreto para ser recogida la mercancía por buceadores. El constante flujo de motos de agua que cruzan los espigones alimenta este tipo de negocio que ha tenido que reinventarse con el cierre de
la frontera del Tarajal.
Un negocio en auge, sobre todo tras el cierre de la frontera
El hachís se hunde preparado para que no se vea dañado y buceadores se encargan de sacar esa mercancía. Ya ha habido varias intervenciones de la Benemérita que se han saldado con la recogida de fardos encontrados de esta manera e incluso la detención de partícipes en este negocio sorprendidos in fraganti cuando iban a sacar fardos, preparados con todos los elementos necesarios para tales menesteres. Ahora se intentará determinar el origen de esa droga, como parte de todas las investigaciones que de forma rutinaria lleva a cabo la Benemérita ante este tipo de situaciones.