Grecia está triste

No hay más que pasear por sus calles, hablar con sus gentes, para percibir la tristeza de los griegos. Pero no solamente por su situación económica, que también. Siendo Grecia un país cercano cultural y tradicionalmente a nosotros (los pilares en los que se cimenta nuestra común cultura occidental son el derecho romano, la filosofía griega, y la tradición judeo-cristiana), no nos resulta difícil comprender los sentimientos de los griegos.
Grecia, es sabido, se encuentra en bancarrota, no puede ni pagar los intereses de su deuda. Sorprende que, habiendo recibido de los fondos europeos una cantidad proporcionalmente parecida a la recibida por otros países europeos, como España, no haya desarrollado sus infraestructuras, no se haya modernizado. Pasear por las calles de Atenas o conducir por las carreteras griegas (casi no hay autovías y mucho menos autopistas) es recordar a la España de hace 20 años.
Entonces, ¿adónde han ido los fondos europeos? Ahora, los griegos lo saben. Simple y llanamente, han sido malgastados, mal administrados, cuando no directamente robados. Y todo ello por dar su confianza a quienes no la merecían.
Dice un proverbio árabe que “cuando alguien te engaña, la primera vez es culpa suya.
Pero la segunda vez, la culpa es tuya”. Y los griegos están tristes y avergonzados.
Tristes porque son culpables de que personas a las que ellos mismos habían elegido una y otra vez, les han engañado.
Avergonzados, a los ojos de Europa, porque saben que se han convertido en mendigos, y porque esto ha sucedido por sus erróneas decisiones en las urnas.
Además, saben que han estado a punto de ser los culpables de arrastrar al resto de países europeos a la bancarrota. Y todo ello por votar sin pensar, elegir sin analizar.
Ahora, cuando a base de humillación han tenido que enfrentarse a la dura realidad, nos desean que a nosotros los españoles no nos suceda lo mismo. Que elijamos con ese sentido común que ellos no tuvieron. En recientes conversaciones he escuchado de ellos: “Nosotros no estuvimos a la altura, pero vosotros tampoco anduvisteis muy finos.
Si votar a ZP por culpa del 11-M dio la medida de la inmadurez política del español, reelegirlo a sabiendas de que mentía no os hace muy distintos a nosotros. También es fácil engañaros, y, como a nosotros, también parece que os gusta”.
Tenemos a la vuelta de la esquina unas elecciones generales. Que Zapatero nos ha estado mintiendo alevosamente (con Rubalcaba como cómplice, cuando no directamente coautor de sus mentiras) no se le escapa a nadie que no le guste que le engañen.
Que con sus decisiones y su forma de entender la política ha provocado la ruina y la desgracia de millones de españoles, es una evidencia solo negada por quienes han perdido el sentido común, y por quienes se han beneficiado personalmente de su desgobierno.
Y, siempre a su lado, ha tenido a Alfredo Pérez Rubalcaba. Éste, ahora candidato del PSOE, había sido Ministro de Educación, Ministro de la Presidencia, y Ministro de Relaciones con las Cortes en los gobiernos de Felipe González, dejando corrupción, paro y crisis económica a su paso.
Posteriormente, ya con Zapatero de Presidente, ha sido portavoz socialista en el Congreso (mintiendo y prometiendo lo que sabía que era imposible cumplir), Ministro del Interior, y Vicepresidente
Primero, con los mismos resultados que en su primera etapa.
¿Merece que, como hicieron los griegos, volvamos a confiar en quien ha engañado a muchos y mentido a todos?
POSDATA 1. A causa de la crisis, y para ahorrar, Cataluña cierra 40 Centros de Salud. ¿Por qué no empiezan por cerrar esas 71 fantasmagóricas embajadas que tienen repartidas por el mundo?  
POSDATA 2. El Presidente de Murcia, Valcárcel, ha “amenazado” con devolver la competencia de Educación al Estado por falta de fondos. Siendo ése uno de los dos pilares programáticos de UPyD (el otro es la reforma de la Ley Electoral en la que ¡por fin! casi todos, también él, parecen estar de acuerdo), ¿será el sr. Valcárcel de UPyD y todavía no lo sabe?
POSDATA 3. En el programa de mi partido Unión Progreso y Democracia (UPyD) para las elecciones autonómicas de Ceuta, en su punto 73, se proponía que se instara al Gobierno a proponer una “…reforma constitucional para que los EXTRANJEROS con permiso de residencia permanente, que tengan establecido su domicilio fiscal en España, y después de un periodo mínimo de residencia legal y efectiva en nuestro país, puedan participar, como electores y candidatos, en las elecciones autonómicas y locales”. Y ello, “…como consecuencia del principio que vincula la ciudadanía política, no a la nacionalidad, sino a la condición de residente permanente en un territorio… siempre tras acuerdo recíproco con el país de procedencia, QUE EN NINGÚN CASO PODRÁ SER UN ESTADO QUE REIVINDIQUE TERRITORIALMENTE NINGUNA PARTE DEL TERRITORIO ESPAÑOL, y siempre que dichos ciudadanos acaten las normas constitucionales fundamentales de España”.
¿Queda clara la posición de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en la reciente polémica sobre el voto de todos los extranjeros?