En tiempos de ruido, de protagonismos excesivos, de crispación y de oportunismos, es necesario parar y escuchar. Escuchar o leer. Leer a quien es un emblema de la convivencia. Hoy la Asamblea de entre tantos gritos, entre tantas acusaciones, odios y pataletas de unos y otros, yo me quedo con el mensaje directo, claro y conciso de Ahmed Liazid. El mensaje de quien sabe de convivencia, de la real, porque ha trabajado para ella. De quien sabe de historia, de quien ofrece claves y consejos adecuados. Tiene toda la razón mi apreciado Liazid al advertir los riesgos que corre esta ciudad si nos dejamos atrapar por guerras estériles. Está bien claro que hay quienes no quieren respetar, quienes desprecian a otros por su condición religiosa, quienes hablan con odio. Hoy se va a utilizar el debate sobre el calendario laboral con otros fines distintos a enlazar y determinar cuáles serán los días en rojo en 2022. Porque creo que realmente a Vox poco le importa la condición de festivo en sí, lo que no quiere es aceptar que todos somos iguales y que como tal ya era hora de disponer de manera simbólica en un calendario unas fiestas religiosas que son algo más que fiestas, que tienen un significado muy especial para la población musulmana. Ese desprecio, ese considerar que aquí hay unos y hay otros, y que los otros valen menos que los unos, no solo es indecente sino que además va en contra de Ceuta, de lo que es.
Aquí se está queriendo normalizar el mensaje del odio, de la diferencia y de la separación. Lo están haciendo pero además disfrazados de cobardes, porque por un lado estos de Vox se rompen la camisa diciendo que ellos no menosprecian a los musulmanes, que ellos no son racistas y luego se llenan de ira y hasta dan una rueda de prensa para decir que ojito, que cuando gobiernen, quitarán las dos festividades religiosas musulmanas por excelencia porque van en contra de la identidad de Ceuta. Puestos ya a hablar de traidores, de promarroquíes y de maquinaciones, mejor que sean valientes por una vez y se quiten la careta para decir públicamente lo que son. No estaría mal.