Actividades domésticas y consumo racional del agua
Grifos
Cerrarlos mientras no se utilizan
Por un grifo abierto salen 10 l/min. Deben repararse los grifos que pierden agua. Un grifo que gotea gasta incluso 30 l/día. Incorporemos a los grifos dispositivos reductores del caudal. Son baratos y fáciles de colocar, ya que se enroscan en los mismo grifos y reducen el consumo hasta un 50%. Si tenemos que cambiar los grifos, pongámoslos tipo monomando. Su consumo de agua es de 6 a 8 l/min.
Ducha o baño
300 l ó 50l Si nos duchamos en lugar de bañarnos, ahorraremos mucha agua. Mientras que una bañera gasta 300 litros, si nos duchamos gastaremos unos 50. También existen dispositivos que reducen el caudal de los grifos de las duchas, lo que facilita la reducción de un 50% de su consumo. Podemos guardar en un recipiente el agua que sale fría mientras esperamos a que salga la caliente. Podemos regar las plantas con este agua. Al igual que en el caso anterior, si fuera preciso cambiar los grifos, optar por los monomando, pues nos permitirán ahorrar agua al reducir el tiempo de búsqueda de la temperatura ideal.
Limpieza de la casa
Optar por el bajo consumo
Si tenemos que sustituir los electrodomésticos, los de bajo consumo incluyen programas de ahorro; además, estos electrodomésticos también son ahorradores de energía. Una lavadora antigua gasta alrededor de 200 litros de agua en cada lavado, mientras que una de bajo consumo sólo 50 litros. Debemos utilizarla con la carga completa y seleccionar el programa más adecuado de acuerdo al tipo de ropa y suciedad. Con el lavavajillas pueden aplicarse consejos similares. Si optamos por un lavado a mano, podemos llenar un poco el fregadero y enjabonar todos los platos a la vez; después los enjuagaremos sin abrir el grifo al máximo. A la hora de limpiar la casa, pensemos en todo aquello que podemos hacer sin agua. Apliquemos la limpieza en seco.
Cisterna del inodoro
Depósitos doble descarga Si no disponemos de depósitos de doble descarga, podemos poner una o dos botellas de plástico llenas dentro del depósito. Así se ahorran unos 3 litros de agua por descarga. Es importante no usar el inodoro como papelera, dado que con cada descarga se vierten entre 6 y 10 litros (algunos modelos vierten incluso hasta 15).
Preparar comida
Cuidar su empleo Gran parte del agua que utilizamos en la cocina la empleamos para lavar alimentos, hervir o cocinar al vapor. Esta misma agua la podemos utilizar para regar las plantas, por ejemplo, si la recogemos en un recipiente. No la tiremos por el desagüe.
Limpieza vehículos
Mejor, un túnel de lavado No utilicemos la manguera para lavar el coche, ya que puede consumir hasta 350 litros de agua. Lo más recomendable es llevarlo a un túnel de lavado, ya que allí dispondremos de instalaciones que reciclan el agua. Si no, procuremos lavarlo con una esponja y un cubo.
Riego
Sistemas de riego adecuados Si tenemos un jardín, es recomendable instalar sistemas de riego adecuados. Instalar un sistema gota agota en la raíz de las plantas permite un riego localizado y, además, es un sistema excelente para su crecimiento. En el jardín puede instalar un programador de riego que se fija al grifo y permite escoger el momento (a primera hora de la mañana o al atardecer) y la frecuencia de dicho riego.
agua y ahorro
Agua caliente Cuanta menos agua caliente gastemos, más ahorraremos desde el punto de vista energético. Cuando abrimos los grifos de casa, no sólo hablamos de consumo de agua, sino también de consumo energético. Por lo tanto, recordemos utilizar agua caliente sólo en los casos necesarios. Además, podemos recoger en un recipiente el agua fría que sale mientras esperamos a que salga la caliente y utilizarla para regar o fregar el suelo.
Mejorar la calidad
Gestos sencillos Hay muchos productos que vertemos por el fregadero -y no deberíamos hacerlo- que son de difícil eliminación o nocivos; la pintura, el aceite, lo productos de limpieza, los disolventes, etc... Un sólo litro de aceite mineral puede contaminar 10.000 litros de agua. Por lo tanto, debemos separarlos y llevarlos al centro de recogida o a los puntos verdes señalados a tal efecto. El vinagre o el bicarbonato son muy buenos desatascadores. Asimismo, existen pinturas, barnices y disolventes ecológicos que no son tan nocivos pero deben llevarse igualmente al centro de recogida oportuno. Podemos utilizar detergentes sin fosfatos y blanqueadores de perborato, en vez de lejía.
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