‘Frodo’ ya está en casa. Este cachorro de nombre tokiniano ha vuelto a su hogar tras varios días en el monte mientras los miembros de la
Protectora de Animales de Ceuta lo buscaban desesperadamente para poder mejorar su destino.
Ahora mismo este pequeño can descansa y se recupera en las casas de acogida de Beatriz Rodríguez y Rocío Palacios. En cuanto a su historia,
‘Frodo’ llegó a uno de estos hogares en el mes de abril con una pata rota y hasta hace unos 15 días se estuvo recuperando de su operación en su extremidad.
Debido a la falta de tiempo para poder cuidar a este cachorro, tuvo que ir a un nuevo hogar “con tan mala suerte que se escapó”. Ese es el momento en el que comienza la “odisea” de “
buscar a Frodo en los montes de Ceuta y en todos sitios” que trascendió a las redes sociales.
Una “odisea” en la que emplearon todo su tiempo y dedicación los miembros de la Protectora, llegando a salir a altas horas de la madrugada cuando había alguna noticia de que se le había visto en algún lugar.
Los voluntarios de la Protectora se pusieron manos a la obra para buscar a este can
“A mí me decían que lo habían visto por mi calle, por eso dejaba el portón de mi bloque abierto para que entrara, pero como tiene un cierre no era posible y cuando nos llamaban íbamos donde fuera y a la hora que fuera”, expresa Beatriz, que continúa comentando que incluso han salido en busca de ‘Frodo’ a las dos de la mañana y a las 6.00 horas.
“Hemos peinado todos los sitios donde nos han dado un aviso de dónde podía estar”, señala Rodríguez.
Además, añade que como este cachorro le tiene miedo al humano pero no a los
perros, ellas salían con sus canes a buscarlo para que interactuara con ellos y ver si podían verlo pero no había suerte.
El lunes por la mañana ya llegó la ansiada llamada de que lo habían localizado por la zona de laantigua cárcel de mujeres. “Lo tuvimos a un par de metros nuestra pero se fue para la zona de maleza, se nos escapó y ya lo perdimos de vista”, expresa Rocío.
“Ya por la tarde volvimos a la zona y no lo veíamos y nos dimos medio por vencidas y cuando comenzamos a costear por la zona del recinto lo vimos desde arriba en la playa”, añade Palacios.
Daba igual la hora y el lugar, si había noticias sobre su paradero siempre acudían
Ahora quedaba lo más complicado, conseguir que ‘Frodo’ volviera a casa ya que es muy temeroso con los seres humanos. A la hora de bajar a la playa, los voluntarios pedían la ayuda de todo el que se encontraban para poder interceptarlo y que volviera.
“Nos acercamos a él pero se nos escapó, pero como yo iba detrás con ‘Fredi’, se quedó parado en una roca. Cuando le hablé se acercó temeroso y en el momento en el que le lancé la mano para buscarlo se escapó por el lado, pero una de las personas que venía consiguió cogerlo”, explica Beatriz Rodríguez.
En tono de broma ambas indican que para que no se escapara le pusieron varios collares, en concreto tres, “así ya no se iba a volver a escapar y por eso subió la escalera con tres collares”.
Un alivio tras muchos días de angustia pensando en el destino que podía haber tenido el animal. “Creíamos que nos íbamos a casa de vacío y cuando lo vimos queríamos que fuera él porque desde arriba es que no se veía bien, hemos estamos mucho tiempo con la tensión de poder encontrarlo”, comentan.
Afortunadamente, a ‘Frodo’ le espera una nueva vida fuera de nuestras fronteras porque su nueva mamá lo está esperando en Francia para que pueda volver a coger confianza y demostrar todo su amor.