Francisco Espíldora Muñoz ESPÍLDORA (VI)

Temporada 1974/75
Casi con la misma plantilla del año anterior, el Racing de Santander iba a retornar a Primera División, demostrando así que su caída fue más bien fruto de su inexperiencia que de su ineficacia. Fundamentalmente solo hubo un cambio importante en el conjunto: Grande,  que había realizado una campaña más que aceptable durante su estancia en el Racing, volvía a su equipo de origen, el R. Madrid. Era alta en el equipo el hispano-brasileño Armando Ufarte, jugador de reconocida clase y que venía precedido de gran fama por sus actuaciones en anteriores equipos y en la Selección Nacional. Sin embargo fue acogido con desconfianza, al pensar que se trataba de un jugador ya quemado, en plena decadencia. Así aparentó en los primeros partidos, pero pronto cogió su sitio en el campo y en una posición más atrasada que la suya habitual, se convirtió en un auténtico estilete para las defensas contrarias con sus pases medidos y profundos.
El principal beneficiario fue Aitor Aguirre, que aprovechó excelentemente las cualidades de Ufarte. Su efectividad aumentó notablemente, consiguiendo diecisiete tantos y fue uno de los artífices del ascenso. También Santamaría me3joró de forma notable su actuación a lo largo de esa temporada. Llegó a hacerse famoso por su facilidad en detener penas máximas, lo que le valió el nombre de “parapenaltys”.
La temporada comenzaba con malos auspicios: Barba causaba baja definitiva para la práctica del futbol y en el mes de Octubre se le ofrecía un partido-homenaje frente al Athlétic de Bilbao.
También el defensa De la Fuente dejaba la práctica del futbol debido a una lesión crónica de tobillo, aunque posteriormente se recuperó, fichando por el Cosmos neorquino,
Geñupi era baja durante la pretemporada, a causa vde una úlcera de estómago y cuando mejoró hubo de oasar por el quirófano para extirparle un menisco, afortunadamente cuando estos dos problemas quedaron resueltos, cuajó una de sus mejores temporadas como jugador racingista.
Analizando los resultados a lo largo de la temporada, llama la atención que el Racing nunca consiguió marcar más de tres goles en un solo partido ni consiguió vencer por más de dos tantos de diferencia, en cambio salió derrotado por 4-0 en Tarragona, por 4-1 en Oviedo y por 3-0 en Córdoba.
Junto a los jugadores ya mencionados, Ufarte y Aitor Aguirre, hay que destacar en la delantera a Zubiría, en el centro del campo a Díaz y a un jovencísimo Camús. Estuvo magníficamente complementado por ESPILDORA que realizó unos partidos muy buenos, Chinchón y Portu.
El Racing consiguió el ascenso matemático al empatar en Baracaldo, cuando aún faltaban tres jornadas para acabar el campeonato liguero.

Homenaje a Antonio Barba
Como antes decía, Barba tuvo que retirarse de la práctica del futbol, por un problema de corazón, fue compañero de ESPILDORA en el Racing y en las categorías inferiores del R. Madrid y el día 13 de Octubre de 1974, se le hizo un partido-homenaje en el Estadio El Sardinero, que enfrentó al Racing de Santander-Combinado de otros equipos contra el Athlétic de Bilbao, que finalmente ganaron el partido por el resultado de1 a 2, siendo los autores de los goles Dani y Astrain por parte bilbaina y de Sotil por el combinado de jugadores.
Y esta fue la alineación por parte del Racing-Combinado: García Remón, López, ESPILDORA, Grande, Rogelio, Marinho, Aguilar, Quino, Santillana, Sotil y Clos.
At. de Bilbao: Iribar, Escalza, Astrain, Guisasola, Igartúa, Madariaga, Platas, Villar, Carlos, Amorrortu y Dani.

Temporada 1975/76
Con el recién adquirido ascenso, la directiva presidida por José Manuel López Alonso, se preocupó de reforzar debidamente el equipo. En especial se procuraron fortalecer dos puntos: en el centro del campo y en la portería.
Para la posición de centrocampista se contó con Juan Carlos, que volvía después de su paso por el F. C. Barcelona y Sergio procedente del Valencia C. F.
También se trajo a un portero, el húngaro Kenderesi, que se lesionó en la pretemporada y se marchó sin llegar a debutar, por ello se volvió a confiar  a Santamaría la defensa del marco cántabro.
En esa temporada se había celebrado por primera vez, la concentración para la temporada en Brañavieja. Debutó el Racing en el Sardinero en el V Trofeo “Príncipes de España” ante el equipo portugués del Os Belenenses, con empate 1 a 1 y a la postre se alzaría con el título de ganador de dicho trofeo. En el equipo había un extremo de aspecto barbudo y desgarbado, que llamó la atención del público por su juego rápido y brillante. El día que su equipo ganó al Honved húngaro por 4 a 2, fue aclamado en cada una de sus intervenciones y ese delantero no era otro que Quinito, que tantas tardes de gloria dio en el estadio cántabro.
Comenzó la liga perdiendo en el estadio Santiago Bernabeu por 2 a 0, ante el R. Madrid. En el siguiente partido disputado en el Estadio El Sardinero el Racing arrolló al R. Zaragoza por 4 a 1, realizando todo el equipo un extraordinario partido, en el siguiente partido se vuelve a ganar, al Sporting de Gijón en el Molinón, el equipo había entrado en una racha muy buena.
La temporada fue marcada por la regularidad, sobre todo en el Sardinero, donde solamente se cedieron cinco puntos en toda la campaña, de los cuales se recuperaron tres en sus salidas, por lo que fue un balance bastante positivo y que tuvo su premio con la permanencia en Primera División y destacando el aporte que hizo la defensa, en la que entre otros destacó ESPILDORA, realizando una d sus mejores campañas en el equipo cántabro.
Pero también ponía fin a su exitosa estancia en el Racing de Santander, en donde permaneció 5 años, logrando calar muy hondo dentro del corazón de los aficionados, y llegó el momento de cambiar de aires, como veremos en la siguiente y última entrega de su historial.