El vocal de seguridad de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV) de Ceuta, José María Romero, adelantó ayer que va a solicitar una reunión con el jefe superior de la Policía Nacional, Javier Daniel Nogueroles; el superintendente de la Policía Local, Sebastián Vega; y el coronel jefe de la Guardia Civil en la ciudad autónoma, Gabriel Domínguez, para tratar de solucionar el problema de “vandalismo” que está sufriendo Ceuta durante los últimos tiempos.
El dirigente vecinal recordó los sucesos acaecidos con los contenedores quemados durante los últimos días, como en el Real la noche del domingo, en Bermudo Soriano el sábado y hace dos semanas en el Recinto, donde -acotó- “nunca antes había pasado algo así”. “Tendremos que ver qué propuestas nos hacen y qué proponemos nosotros”, aseguró Romero.
El representante de la Federación manifestó que “la quema de coches y de contenedores es un problema de vandalismo que atañe a toda la ciudad”, por lo que solicitó más presencia de agentes de la Policía Local y la Policía Nacional en las calles. “Que los jefes se pongan con este asunto y destinen más efectivos”, imploró Romero.
Aun reconociendo la labor de la Policía Nacional, también reclamó que realicen controles con mayor frecuencia y que la Policía Local se involucre para tratar de solucionar este asunto de inseguridad ciudadana.
En este sentido, Romero resaltó que dichos controles, que se intensificaron durante la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la ciudad el pasado día 23 de marzo, “no se llevan a cabo con la frecuencia de antes”.
Con esto, matizó, no quiere decir que estos controles aumentaran expresamente por la visita del presidente. De hecho, también comprende que, como la mayoría de ellos se efectúa de noche, que es cuando se realiza la mayoría de actos vandálicos, puedan “molestar a los vecinos”.
Lo que está claro, según dijo Romero, es que “esta plaga no para, ni con ni sin controles”, y que no saben cuál es la solución.
Por su parte, el presidente de la Federación, Francisco García, indicó que, efectivamente, Ceuta “es una ciudad sin ley otra vez” y protestó porque continúan con el problema de la seguridad -o inseguridad- ciudadana “a cuestas”.
García reconoció que la Policía “estuvo unos días realizando controles, pero se fue el presidente del Gobierno y ya no hay nadie”. Para terminar, respecto a la Policía Local, afirmó que, en su opinión, no dispone de suficientes vehículos.
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