Fomento inicia la campaña para el cierre de empresas sin licencia

La Consejería de Fomento ha comenzado ya a actuar en materia de disciplina urbanística, tal y como había prometido la consejera de Fomento, Susana Román, a los pocos días de su nombramiento para este cargo. En las últimas semanas se han acelerado todos los trámites de los distintos expedientes abiertos cuyo acción ya inició el anterior responsable del área, Guillermo Martínez.

Pues bien, en la jornada de ayer la Policía Local procedió a la clausura de tres establecimientos en la zona de la Almadraba, los cuales pertenecían al mismo dueño y que no tenían el correspondiente permiso de apertura expedido por la Ciudad Autónoma.
Los locales que se han cerrado son un restaurante, un lavadero de coches y un establecimiento comercial más del mismo complejo y que está a escasos cien metros del cruce que sube hacia Loma Colmenar.

Inicio
A las once y media de la mañana se personaron en esta zona un grupo de casi veinticinco agentes. La dotación de la Policía Local estaba compuesta por tres dotaciones de la Unidad de Intervención Rápida y cuatro zetas de la unidad de Seguridad Ciudadana.
Mientras que los miembros de la UIR se desplegaron en ambas zonas de la carretera de la Almadraba para controlar cualquier posible incidente que se pudiera producir, circunstancia que ni de lejos se planteó, otro grupo de la Unidad de Intervención Rápida acompañó a los agentes que se habían desplazado en los zetas y que eran los que llevaban en sus manos toda la documentación.
Estos agentes llevaban en sus manos  los decretos de cierre que habían sido emitidos por parte de la Consejería de Fomento y por tanto firmados por sus máximos responsables. Entraron a la vez en un hotel que está encima del restaurante, el propio restaurante que se encontraba vacío, un lavadero de coches y algunos establecimientos más de la zona, aunque en uno de ellos se le enseñó a los policías un decreto de apertura que era del año noventa y cuatro.
En el caso del restaurante estuvieron conversando con una persona que tenía la llave del mismo y en cuanto al lavadero de automóviles en su interior estaba un todo terreno, al cual se le dio el oportuno permiso para que su propietario pudiera abandonar el lugar y también un todo terreno Hammer que se quedó dentro y del que tomaron la matrícula antes de clausurar.

Mando
La operación que estaba al mando de unos de los inspectores de la Policía Local se terminó en unos treinta minutos, cuando los policías procedieron a pegar en las puertas de cada de los establecimientos las hojas donde se decretaba el cierre de las instalaciones y a la vez que instalaban cintas de la Policía Local para que no se pudiera proceder a la apertura de los mismos.
En primer lugar se dio la orden a dos de las tres lecheras de la Unidad de Intervención Rápida que ya podían marcharse del lugar, quedándose una de retén, mientras que sus compañeros a terminar con las últimas obligaciones burocráticas posteriores a la clausura.
Durante todo este tiempo, fueron muchos los curiosos que con sus vehículos intentaban detenerse, era una hora punta, para observar el despliegue de los agentes de la Policía Local para cumplir con los decretos de cierre ordenados por la Consejería de Fomento, a los que continuarán más.

Ya no se va a parar con los decretos

El equipo multidisciplinar que preside la consejera de Fomento, Susana Román, es el que diseñará todas las semanas las distintas operaciones que se realizarán no solamente para la clausura de establecimientos que no tengan la licencia de apertura, sino también de las construcciones ilegales. Es un equipo donde están representados la propia Consejería de Fomento, la Consejería de Presidencia y Gobernación a través de la Policía Local y del Parque Móvil y la Consejería de Medio Ambiente, Servicios Urbanos y Barriadas.  
Hay que recordar que la semana pasada la misma consejera Susana Román indicó a los técnicos de la Consejería que le establecieran ya un calendario con los distintos expedientes que se pudieran poner en práctica, pero con un estricto orden de antigüedad. Por tanto, parece que se ha iniciado un proceso que ya no tendrá para nada marcha atrás.

Trabajo rápido
Los agentes se presentaron con las órdenes de clausura firmadas y rubricadas por la Consejería de Fomento. Comenzaron a realizar las oportunas comprobaciones en los establecimientos y procedieron a la clausura de tres de ellos. Más de veinte agentes, incluídos los de la Unidad de Intervención Rápida (UIR) se personaron en el lugar, pero no hubo que destacar ningún tipo de incidentes en la zona, con una gran curiosidad por parte de los conductores.

En detalle

Vehículos policiales. Aparte de los vehículos de la UIR también se desplazaron hasta la zona varios zetas de la Policía Local para la intervención.

Decretos en la mano.  Uno de los policías con los decretos de cierre en la mano habla con sus compañeros durante el operativo policial.