La Fiscalía General de
Tetuán ordenó este miércoles a la Policía Judicial de esta ciudad de
Marruecos que abriese una investigación para esclarecer el supuesto robo y posterior venta de una niña a una pareja residente en Ceuta. Fue la la Asociación ‘Al Karama’ de Defensa de Derechos Humanos la que
destapó la supuesta existencia de una red criminal especializada en el robo y venta de niños recién nacidos, con posibles ramificaciones en España tras haber detectado el caso de una niña llevada ilegalmente a la ciudad española de Ceuta. El presidente de la Asociación ‘Al Karama’, Lahcen Aqbayu, declaró a Efe que su ONG interpuso una denuncia ante la Fiscalía competente de Tetuán contra una red de que se dedicaba al secuestro, robo y venta de bebés. Aqbayu añadió que este caso se destapó después de que una marroquí denunciase que su hija, a la que reconoció que tenía pensado abandonar, fue vendida a una pareja residente en Ceuta, en una operación llevada a cabo con ayuda de varios intermediarios marroquíes y españoles. “Tenemos contabilizados hasta ahora siete casos de niños que fueron vendidos por los mismos intermediarios, que cobran entre 30.000 y 70.000 dirhams (2.800 y 6.500 euros) por cada bebé”, deploró Aqbayu quien añadió que la madre que destapó el caso está recibiendo amenazas de los intermediarios. Una fuente policial indicó a Efe que los efectivos de policía judicial en Tetuán abrieron este miércoles una investigación sobre el caso tras recibir órdenes de la Fiscalía General. La misma fuente subrayó que la Policía interrogará a la madre, tras su aparición en un vídeo en el que asegura que una serie de personas la engañaron porque entregó su bebé a una pareja en Ceuta con la condición de que ella seguiría en contacto con la niña, lo cual no sucedió. La madre (soltera) aseguró que esas personas se aprovecharon de las condiciones de precariedad en que vivía, agravadas porque había sido abandonada por su pareja. Cuenta que fue visitada por una pareja española que le acompañó a una clínica de Tetuán para asegurarse del sexo del bebé (pues querían una niña), y añadió que en el momento del parto apareció otra pareja española acompañada de una marroquí que registró la niña en su nombre. “Tras pasar tres días en la clínica, yo volví a casa en un coche mientras que mi hija se la llevó un hombre que se llama Paco en otro coche. Desde entonces no la he vuelto a ver”, cuenta la madre emocionada en declaraciones al diario ‘Tetouan Press’.