La reacción entre algunos partidos en la oposición no se ha hecho esperar. Fatima Hamed, de MDyC, acusa al Gobierno de, directamente, “tomarnos el pelo”, después de “hacernos esperar meses por una supuesta auditoría que comienza diciendo que el informe redactado no reúne las condiciones y requisitos propios de una auditoría”, ha denunciado en declaraciones a El Faro. “Ya de entrada, se pone el parche diciendo que el informe elaborado no es una auditoría e insiste en que no podrá ser considerado así en sentido estricto”.
Del informe, que apenas consta de cuatro folios y en los que falta mucha información, también alude Hamed a la pretensión extraída del mismo, al indicarse que “cada uno de los diputados de la Ciudad puede hacerse una idea razonable y cierta del estado financiero del contrato, permitiendo a cada interesado obtener sus propias conclusiones, que podrán ser diferentes según las estimaciones de hecho de las que parta cada cual”.
“Es decir, que nos emplaza a que cada uno saque sus propias conclusiones, como si los concejales fueran expertos en la materia, tal vez contagiados por la práctica habitual del desgobierno en todas las materias que les ha llevado a convertir en desastre todo lo que gestionan”, denuncia.
“Lo que sí puede concluirse es que si como se dice a la hora de estimar los beneficios, Trace ha realizado una baja al precio del contrato del 10% a lo que hay que sumar las mejoras ofertadas, estimadas en 600.000 euros/año, la empresa creía que ganaría dinero con menos precio y más actuaciones y por lo tanto así habría que tenerlo en cuenta y exigir el cumplimiento del contrato”.