El Globe fue ayer el escenario de una falsa alarma por incendio a la que acudieron dos camiones autobomba del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento, quienes tras comprobar que el fuego estaba controlado y ya extinto, volvieron al Parque de Bomberos.
También recibieron un aviso por la noche de la Guardia Civil, puesto que un destacamento de la unidad de fiscal se encuentra en el Puerto, pero los bomberos comprobaron que sólo era humo.
El motivo fue que, al cortar con el soplete parte del puente de mando del ballenero y ser retirado por la grúa, la madera que recubría las paredes del habitáculo avivó sus llamas por el oxígeno. Tanto Policía Portuaria como Guardia Civil y Capitanía Marítima se habían cerciorado de que el fuego estaba controlado, pero aun así los bomberos se vieron obligados a asistir al aviso.
Según explicaron los responsables de las tareas de desguace del buque, esto es algo normal y esperado, ya que aún queda madera y se está procediendo a cortar el barco con sopletes. Además, es posible que hechos como el de ayer vuelvan a sucederse, pero de manera controlada. Diferente caso fue el del incendio del pasado miércoles, que se debió a un cable.
Que se quemara la madera fue un paso necesario para poder extraer con la grúa el primero de los grandes trozos, ya que permitió soltarlo con la colaboración de la fuerza de la grúa. En total, 2.500 kilos de Globe que ya están en tierra, y que esperarán a unirse al resto del barco en un proceso que se realizará en varias fases.
La primera, empezada esta semana, terminará cuando sólo quede el casco en el agua. Entonces, será transportado hasta el varadero. Ahí, se terminará de desguazar en tierra. Cada fragmento de Globe será troceado en piezas más pequeñas y después, cuando se haya terminado de cortar con el soplete, se montará en un barco.
Ese día, el globe cruzará el Estrecho de Gibraltar hasta Algeciras, donde permanecerá en unos almacenes hasta que la chatarrería que los guarde encuentre una fundición que compre el hierro a buen precio. El problema, señalan los encargados de desguazar el Globe, es el alto coste que supone llevar hasta Ceuta el material necesario para la operación. “Es lo comido por lo servido”, explica uno de los responsables de la empresa de Barakaldo que se ha hecho cargo del buque.
Las previsiones son que se conseguirán en torno a trescientas toneladas de chatarra, en concreto de hierro, que serán retiradas por tres personas que actualmente trabajan en la cubierta del ballenero.
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