Es una de las peores noticias que tenemos que dar. Sin duda la que nunca hubiéramos querido escribir. Ha fallecido
nuestro compañero Reduan Ben Zakour. Sin duda se va el alma de El Faro de Ceuta y me atrevo a decir que una de las personas más queridas en esta ciudad y en todos los medios de comunicación. Se lo ganó sin esfuerzo, porque
a Reduan se le quería por cómo era. No tenía que hacer nada en especial, tenía ese duende, ese don, esa gracia que muy pocos atesoran. Se nos va alguien que era más que un compañero de trabajo, se nos va un amigo, alguien que formaba parte de nuestras vidas.
El Faro de Ceuta no volverá a ser el mismo. De esto estoy segura, lo estoy yo y mis compañeros. Se nos ha ido una persona que con su cámara ha captado la historia de Ceuta en miles de
fotografías. Un ser increíble que tenía mucho que contar, que cargaba una vida plena a sus espaldas. Un trabajador que superó todas las trabas y que se formó de manera autodidacta.
Lo duro no es solo contar que Reduan se nos ha ido sino intentar ahora emprender una vida periodística sin él, sin sus charlas, sin sus confidencias, sin esos momentos que tenía con todos y para todos. Reduan era único. Lo sabemos quienes lo hemos disfrutado hasta ahora pero lo saben todos los que han pasado por esta Casa.
Reduan era el mejor y lo va a seguir siendo en los corazones de todos nosotros.
Persona noble, todo un señor, luchador, entregado a la profesión y siempre animado a cubrir cualquier evento en el que se superaba. Ese era nuestro Reduan. Su espacio queda vacío físicamente. Su silla, su mesa perfectamente ordenada, sus papeles, sus reseñas de sus bodas y bautizos… ese rincón es una de las maravillas que tenemos, ahí nos vamos a empeñar en que siga siempre presente.
La marcha de Reduan Ben Zakour ha sido un mazazo para todos, desde el primero hasta el último que integramos la familia de El Faro, porque somos eso, una pequeña gran familia que ha perdido a uno de los suyos. Y ha perdido al más especial, al que será siempre con todos los galones parte del corazón de un periódico que te daba la vida pero al que tú diste todo. Donde estés Reduan, nuestro COMPAÑERO, te querremos siempre.