En una rueda de prensa desde Barcelona, donde ha citado o hecho referencia a Ceuta en tres ocasiones, el ministro de Asuntos Exteriores,
Unión Europea y Cooperación de España, José Manuel Albares, ha valorado muy positivamente el inicio de una nueva etapa de relaciones con
Marruecos tras los comunicados que se han ido difundiendo a lo largo de las últimas horas y que se interpretan como un
punto final a la crisis diplomática abierta desde hace meses entre ambos países. Albares ha mencionado que, tras ello, ha mantenido conversaciones, cuyo contenido no ha trascendido, con diferentes políticos, entre ellos los presidentes de Canarias, Ceuta y
Melilla. "Se abre un nuevo periodo con la determinación de abordar conjuntamente los desafíos comunes, en particular queremos reforzar la cooperación en la gestión de los
flujos migratorios en el Mediterráneo y el Atlántico", ha afirmado el ministro quien además ha asegurado que pedirá comparecer ante la Comisión de Exteriores del Congreso para explicar con detalle qué significa "esta nueva etapa". Igualmente ha adelantado que el 2 de abril visitará Rabat, a modo de adelanto antes de la visita del presidente de España, Pedro Sánchez, donde se trazará la hoja de ruta de estas nuevas relaciones con las autoridades marroquíes. "La estabilidad y prosperidad de nuestros países están ligadas", ha afirmado el ministro, "España y Marruecos están unidos por la historia y por la geografía". Albares ha hablado de "unidad total" en el seno del Gobierno en lo referente a esta cuestión ya que, "en momentos tan convulsos para España y para Europa", con la guerra en suelo ucraniano como principal amenaza, "deben anteponerse los intereses de todos los españoles". En esta última alusión ha especificado que, especialmente, el Gobierno debe salvaguardar los intereses de "canarios, ceutíes, melillenses y andaluces, quienes tienen que estar protegidos y defendidos especialmente en tiempos tan convulsos donde el orden europeo está siendo amenazado". Aunque el máximo responsable de Exteriores sí ha respondido a preguntas de los medios, estos no han lanzado ningún interrogante respecto a la hipotética re-apertura de las fronteras de Ceuta y Melilla que llevan cerradas desde el inicio de la pandemia, hace ya más de dos años. En lo relativo a los datos Albares ha recordado que más de 800.000 marroquíes residen actualmente en España y que más de 17.000 empresas españolas tienen algún tipo de relación comercial con el país árabe.