El titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha condenado este martes a un individuo cuya identidad responde a las iniciales Y.K. por un delito de robo con violencia y por otro leve de lesiones.
Se ha dictado in voce la condena de 1 año y 1 mes de prisión que se le ha sustituido por la expulsión del territorio español por un periodo de 8 años por el delito de robo con violencia, así como un mes de multa con una cuota diaria de 5 euros por el leve de lesiones.
La víctima de estos hechos ha relatado que el pasado 23 de agosto sobre las 18.30 horas se encontraba por la avenida de Otero cuando, sin esperarlo, el acusado intentó apoderarse de su móvil forcejeando con ella sin que llegara a conseguir su objetivo.
Asimismo ha explicado que con sus gritos alertó a su padre, que iba más atrás, y que ambos empezaron a perseguir el acusado. También llamaron a la Policía, a la que indicaron el lugar en el que se había escondido el agresor, una zona muy próxima a los hechos.
Como consecuencia de estos hechos la víctima sufrió contractura muscular cervical con limitación de movimientos de rotación y tardó en curarse 4 días.
El acusado, por su parte, ha señalado que en ningún momento se acercó a intentar robarle el móvil, ya que lo único que pretendía era pedirle dinero para comida. Que ella se asustó y que, como empezó a gritar, huyó del lugar.
Un agente de la Policía Nacional que se personó en el lugar ha indicado que los propios testigos fueron los que le llevaron hasta donde se escondía el procesado y que este no puso ningún tipo de impedimento para ser detenido.
Otro condenado por un delito de robo con fuerza
Por otro lado, el titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha condenado a M.A.H. por un delito de robo con fuerza. El acusado ha reconocido los hechos y aceptado una pena de 9 meses de prisión que se ha suspendido por un periodo de 3 años. Además, tendrá que pagar 328 euros en concepto de responsabilidad civil.
Los hechos a los que se ha hecho referencia en esta conformidad ocurrieron el 22 de abril de este mismo año. Sobre las 06.15 horas, el acusado, con ánimo de obtener un ilícito beneficio, fracturó el cristal de la puerta trasera de un coche, accediendo al interior del mismo y apoderándose de 800 euros, un portamonedas y una tableta electrónica marca Samsung.