El ‘Informe 2012 sobre el estado del sistema educativo’ que acaba de publicar el Consejo Escolar del Estado (CEE) reclama de las autoridades la puesta en marcha de “políticas dirigidas a mejorar el nivel de aprendizaje de los estudiantes de Ceuta y Melilla” a fin de “acercarlo al del resto del Estado” habida cuenta de que sus resultados académicos siguen siendo “notablemente inferiores a los del resto del territorio estatal en las tres áreas que mide (Lectura, Matemáticas y Ciencias)”.
“Se aprecian diferencias notables entre los distintos territorios del Estado tanto en la financiación pública de la Educación como en los resultados obtenidos por el alumnado en las evaluaciones nacionales”, lamenta el Consejo Escolar en su voluminoso dictamen, con más de 500 páginas, que este año no incluye la separata especialmente dedicada a las ciudades autónomas que sí incluyó en ediciones anteriores, aunque sí alerta de sus especificidades.
“Las singulares circunstancias geográficas, demográficas, culturales y económicas de Ceuta y Melilla”, subraya sobre dos ciudades que, no obstante, no viven la misma realidad educativa, “condicionan las políticas y los resultados educativos de estas dos ciudades autónomas”. “Un rasgo distintivo de ambas”, añade, “es su diversidad lingüística y cultural. Así, aproximadamente el 40 % de los ceutíes tienen como idioma materno el ‘dariya’, un dialecto coloquial del árabe, de uso exclusivamente oral, que no tiene reconocimiento oficial”.
Para corregir esa realidad nociva, el órgano consultivo reivindica “extremar la necesaria cooperación territorial que contribuya a aminorar las diferencias tanto en los recursos materiales y humanos al servicio de la Educación como en los resultados educativos del alumnado de las distintas comunidades y ciudades autónomas”.
De acuerdo con los datos que justifican estas apreciaciones, los del Informe PISA 2009, casi la mitad (el 48,8%) de los estudiantes de 15 años de Ceuta y Melilla muestran un “bajo rendimiento” en Lectura, Matemáticas y Ciencias. Las Islas Canarias (36,1%), las Islas Baleares (28,3%) y Andalucía (26,8%) completan el cuadro de regiones con más de un cuarto de su alumnado en esa situación. Castilla y León (13,3%), Navarra (14,2%) y el País Vasco (14,6 %) son las únicas Autonomías que ya han alcanzado el objetivo establecido a este respecto en Europa para 2020 (no pasar del 15%).
Mejor que Melilla
Para ver el vaso medio lleno, a Ceuta sólo le queda compararse con Melilla, a la que parece ir dejando definitivamente atrás en lo que a resultados académicos se refiere. El Consejo del Escolar del Estado aprecia “una ventaja sistemática” del alumnado caballa con relación al melillense “en materia de rendimiento escolar”, singularmente en Primaria.
Los números que recopila el ‘Informe 2012’ a partir de la evaluación de diagnóstico realizada en ambas ciudades el año pasado, que tuvo carácter censal y por tanto incluyó a todos los alumnos que finalizaban el segundo ciclo de Primaria y el segundo curso de Secundaria son reveladores.
En competencia en Comunicación Lingüística, el 38,5% de los alumnos de Ceuta se sitúan en el Nivel 3 de rendimiento o superior alcanzando, “suficiente”, pero este porcentaje se reduce al 23,3% en la ciudad hermana. En cuanto a los niveles de rendimiento deficientes, el 32,7 % de los alumnos de Ceuta no alcanza el Nivel 2, porcentaje que se eleva al 42,2 % en Melilla.
En competencia Matemática, el 33,1 % de los alumnos de Ceuta se sitúan en el Nivel 3 de rendimiento o superior, ratio que cae al 23,7% en Melilla. Por otro lado, el 27,5 % de los estudiantes de Ceuta no alcanza el Nivel 2 (el 44,6 % en Melilla). En Conocimiento e interacción con el mundo físico, las diferencias se reducen: el 37,2% de los alumnos de Ceuta y el 32,2% de los melillenses se sitúan en el Nivel 3.
Para terminar, en competencia Social y ciudadana, el 38,0% del alumnado caballa alcanza el mínimo exigible por un 32,6% en la otra ciudad española norteafricana. No llegan al Nivel 2 el 29,9% y el 38,9 %, respectivamente.
“Aunque de un modo menos acentuado que en Educación Primaria”, advierte el informe del Consejo Escolar a la hora de analizar los resultados obtenidos en Secundaria, “se sigue advirtiendo una cierta ventaja de Ceuta con relación a Melilla en materia de rendimiento escolar”.
Solo uno de cada cuatro ceutíes adultos tiene estudios superiores
Ceuta y Melilla arrastran una enorme cantidad de años perdidos y tienen poco tiempo para recuperarlos. Según el último informe del CEE, con datos relativos al año 2010/2011, sólo uno de cada cuatro residentes (el 23,1%) con entre treinta y treinta y cuatro años han terminado la Educación Superior, casi 17 puntos por debajo del ‘Objetivo Europa 2020’, fijado en alcanzar el 40%. El País Vasco ocupa la primera posición con un 60 % (el 64,1 % de las mujeres y el 55,9% de los hombres), aunque los extraordinarios datos de esta región tienen su ‘truco’, ya que se deben, en parte, a la elevada contribución de la tasa bruta de
la población que finaliza las Enseñanzas Profesionales conducentes al título de Técnico Superior. Cuando se desagregan por sexo las cifras de este indicador se observa que, en el conjunto
de España, hay una diferencia de 10,2 puntos porcentuales a favor de las mujeres, diferencia que se presenta en todas las Comunidades Autónomas, llegando a alcanzar más de 18 puntos de diferencia en Asturias y en Navarra. Paradójicamente, en Ceuta y Melilla es al contrario: el 21,1% de las mujeres con esa edad completan estudios superiores por un 25,1% de los varones.
El 59,2% de los niños extranjeros escolarizados deja los estudios
Aunque Ceuta sigue siendo, también en el año académico en curso, según los datos actualizados del Ministerio de Educación, la región española con menor porcentaje de estudiantes extranjeros escolarizados (apenas algo más del 3% del total), el alumnado foráneo de la ciudad autónoma es líder nacional en tasa de abandono prematuro de las aulas. Según las cifras que maneja el Consejo Escolar del Estado (CEE), el 59,2% de los estudiantes extranjeros dejan las clases antes de tiempo, una tasa que dobla la de los alumnos nacionales (30%) en las ciudades autónomas. La media del país se eleva, respectivamente, a un 23,3% de abandono educativo temprano en el caso de los estudiantes españoles y a un 43% en el de los foráneos.