La Asociación DAUBMA exige que haya un control en Ceuta sobre los perros para frenar las prácticas de algunos dueños que acostumbran a llevarlos sueltos. Esto puede generar inseguridad o conflictos con otros canes como sucedió ayer.
Un perro sufrió heridas al ser mordido por otro que paseaba suelto, sin estar amarrado a la correa como es obligatorio. DAUBMA recalca que la Policía Local debe estar más atenta al cumplimiento de estas prácticas.
“No nos mentalizamos, otra vez ha ocurrido. Un perro suelto en la calle ataca a otro perro que iba amarrado con su correa y que iba de paseo con su dueño, causándole varias heridas por mordeduras”, denuncia la asociación.
“Gracias a la rápida reacción de ambos dueños el ataque no tuvo un mal irreparable, pero sí lesiones para el atacado, que tardará en sanar de las heridas causadas”.
“Las personas con las que convive aún están con el susto y la ansiedad provocada por unos hechos que no deberían haber ocurrido”, concretan desde la asociación.
En Ceuta no es la primera vez que suceden hechos de este tipo por “la irresponsabilidad de las personas que tienen bajo su tutela a perros y no los llevan con correas. Hoy ha sido otro can, mañana puede ser un niño de corta edad”.
DAUBMA recuerda que los perros solo pueden ir sueltos en las zonas que están habilitadas para ellos, como las áreas de recreo.
Entre las sanciones existentes destacan los 150 euros de multa si se lleva a un perro sin correa o los 300 euros si llevan un perro peligroso sin correa.
“Esta costumbre tan extendida se debe de acabar, desde la ciudadanía se debería tener conciencia y avisar al 092 cada vez que se vea un perro suelto. Y el consejero de Gobernación debería de dar las órdenes oportunas a la Jefatura de la Policía Local para que extreme el celo en la aplicación de la normativa de tenencia de mascotas en la vía pública sin ir atados con correas”, expone.
“Esto tiene implicaciones legales tanto en términos civiles como penales”, matiza la entidad.
“El poseedor o propietario de un animal es responsable de los perjuicios que cause, incluso si el animal se escapa o extravía. Esto significa que si un perro suelto ataca a otro perro o a una persona, el dueño debe resarcir los daños”, recuerda.
La indemnización puede incluir abono por daños materiales (ropa, accesorios, etc.), gastos veterinarios si el ataque afecta a otro animal, secuelas derivadas del ataque, gastos médicos y días de rehabilitación si una persona resulta herida.
Así también se contabilizan los días de baja si la víctima es una persona, el daño moral en caso de fallecimiento del animal atacado.
Entre las consecuencias penales están responder si el dueño no tomó las precauciones necesarias para custodiar o pasear al perro.
Las penas varían según la gravedad de las lesiones y pueden incluir prisión.
“Es crucial mantener a los perros bajo control y cumplir con las normativas para evitar situaciones peligrosas y responsabilidades legales”, explica la asociación.
“La responsabilidad legal por una mordedura de perro puede recaer directamente sobre el propietario del animal si se demuestra que su negligencia fue un factor determinante en el incidente. La negligencia puede manifestarse de varias formas, como la falta de control del perro, la falta de adiestramiento adecuado, la falta de atención o supervisión del animal, entre otros”.
Entre las obligaciones de los propietarios y poseedores de animales durante estancia en la vía pública se incide en que los perros que circulen por la vía pública irán acompañados por su dueño, propietario o poseedor, que será el responsable de cualquier daño que provoque.
Todos los perros irán sujetos por una cadena o correa y collar o arnés, que permita un control vigilancia del animal por su propietario o poseedor, sin perjuicio de lo establecido en la Disposición Adicional Primera de este Reglamento.
Quedan prohibidos los collares de pinchos, ahogo o eléctricos y las correas deberán ser suficientemente largas para permitir el olfateo y rastreo, pero sin permitirse las extensibles.
Asimismo, se prohibirá el uso de vehículos rodantes (patines, patinetes, motos, bicicletas...), siempre que se esté acompañado de uno o más perros.
Será preceptivo el uso del bozal en los siguientes supuestos: en los animales catalogados como potencialmente peligrosos; cuando el animal manifieste un comportamiento inseguro o agresivo; o cuando haya protagonizado agresiones a personas o a otros animales.
También cuando las autoridades sanitarias y/o administrativas lo ordenen mediante resolución motivada. Quedan exentos de ser conducidos con bozal, los perros guías o perros de asistencia.
El propietario o poseedor de animal deberá adoptar todas aquellas medidas posibles, que eviten que el animal cause molestias a menores o viandantes.
Una hilera de multas. Una detrás de otra impuestas como resultado de la acción irracional…
Tras casi dos semanas de incertidumbre, la desaparición de Mohamed Lagrit se ha resuelto de…
El Sindicato de Enfermería (Satse) de Ceuta ha abierto el plazo de inscripciones en el…
Era mayo de 2023. La Guardia Civil abría una investigación para esclarecer el robo de…
La Real Federación de Fútbol ha dado a conocer los horarios de la jornada decimoséptima…
¿La Ciudad nos toma por tontos? Es lo que se preguntan los trabajadores de la…