La Casa de Ceuta en Cádiz ha acogido la exposición realizada por Juan Antonio García Ponferrada, en un salón decorado con detalles propios de la Semana de Pasión en la sede de esta institución. Al evento, han acudido socios y simpatizantes, así como autoridades invitadas para la ocasión, .
García Ponferrada fue el pregonero de la Semana Mayor de Ceuta de 2017. Este caballa de adopción, arribó a la Ciudad Autónoma el 7 de enero de 1975 pensando que su estancia iba a durar poco tiempo su y pese a contraer matrimonio con una mujer de su Lucena natal, se afincó en la considerada “patria chica” donde tuvo sus hijos, estos sí, caballas de nacimiento.
Tras la presentación del conferenciante por parte del presidente de esta institución, Silverio de la Yeza, se proyectó un video de una parte del pregón del año pasado, que comenzó con la interpretación de la marcha Amargura, interpretada por la Banda Municipal Ciudad de Ceuta.
Tanto en su pregón como en su actuación ante los presentes mostró su proceso de conversión a “caballa de corazón”, siendo parte muy importante del mismo su entrada en el mundo cofrade ceutí como parte de su reconversión a “ferviente cristiano”.
En su exposición relató que empezó como vecino al residir en sus comienzos en un apartamento sito en la Plaza de África, frente a la Basílica de Nuestra Señora de África, ante la que “se siente embargado por el misticismo que de su imagen emana”, ha expuesto en sus palabras.
Ha seguido definiendo la Cuaresma como un tiempo de introspección, de una mirada atrás a lo ya recorrido y a la situación actual de cada cristiano a lo largo del camino de la existencia terrenal de cada uno, de reflexión sobre en qué dirección marcha cada persona.
También señaló el compromiso de cada cofrade de defensa de la fe, en especial en lugares donde, como es el caso de Ceuta, coexistimos los cristianos con practicantes de otras religiones. Agregó que la Semana Santa de cada ciudad o pueblo tiene su personalidad propia, sus notas distintivas y como ejemplo expuso las diferentes denominaciones de los elementos característicos de nuestros pasos, según cada pueblo o provincia.
Al finalizar su intervención, el conferenciante hizo entrega al presidente de un cuadro del simpecado actual de la Real Hermandad del Rocío de Ceuta, que se renovó a los veinticinco años de la creación de la Hermandad, sustituyendo al anterior.
De la Yeza le hizo entrega, a su vez, de unos recuerdos de su estancia en Cádiz, en especial de la tacita de plata, icono de la asociación, haciéndole firmar en el Libro de Honor de la Casa y agradeciéndole su intervención.
El acto ha finalizado con la degustación de vino dulce y torrijas, tradicionales de esta festividad.
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