Las XV Jornadas sobre Geopolítica y Geoestrategia finalizaron ayer con gran éxito de participación y con asuntos de relevancia local e internacional encima de la mesa de debate
Es innegable que el escenario internacional actualmente vive uno de sus momentos más convulsos no solamente por la velocidad con la que se suceden los acontecimientos sino también por la incertidumbre que hace que cualquier predicción o estimación sobre cómo se moverán las fichas en el tablero mundial será inexacta. Fue una de las conclusiones a las que llegó ayer el coronel y analista geopolítico Pedro Baños quien señaló que el continente africano y Oriente Próximo seguirán siendo los focos de conflicto que afectará a las relaciones internacionales en los próximos meses e incluso años. La demografía, la nueva geopolítica, la geoeconomía y la simultaneidad de disparidades son los desafíos a los que se está enfrentando ahora los estados. Los grandes movimientos de población especialmente a Europa ya han generado una reacción, pues en la UE ya coexisten once muros para ‘frenar’ la inmigración.
Todas estas cuestiones abrieron la última tarde de las XV Jornadas sobre Geopolítica y Geoestrategia en el salón de actos del Ayuntamiento de la mano de Baños que augura el final del Estado Islámico, pero el conflicto bélico en Siria y zonas de influencia será sustituido por otro problema no resuelto que se remonta incluso a años después de la Primera Guerra Mundial y que se daría entre kurdos y chiíes. Y detrás de unos y otros están detrás las grandes potencias mundiales como Estados Unidos y Rusia.
Desde el fracaso de las llamadas primaveras árabes, pues no han conseguido los objetivos por los que surgieron, explicó Baños, han venido a quebrar el magreb en un continente que ya acumula lo que llamó “Estados fallidos”. Todos aquellos del África subsahariana que han perdido la capacidad de mantener el control sobre la totalidad del país. “Y no es una cuestión de dinero”, remarcó Baños.
Todo ello afectará de manera decisiva, pues ya lo está haciendo a Europa, pues los conflictos bélicos y los intereses económicos favorecen los grandes movimientos de población hacia ese mundo desarrollado, el Occidente, y donde más nos afecta Europa.
Las jornadas, que ya cumplen la décimo quinta edición con éxito, finalizaron con una mesa redonda en la que se debatió y se intercambiaron opiniones sobre todos los asuntos puestos encima de la mesa estos días, seguida del acto oficial de clausura. Los asistentes, así como autoridades y ponentes de las jornadas asistieron a las 20.55 horas al acto de arriado de bandera en la Plaza de África, tradicional broche de oro para esta exitosa iniciativa impulsada por la UNED y la Comandancia General de Ceuta (Comgeceu).
El reto, potenciar la cultura de Defensa La ponencia final antes de la mesa redonda y clausura corrió a cargo del coronel del Instituto Español de Estudios Estratégicos, Ignacio Fuente, quien charló sobre la situación de la cultura de Defensa en España, cómo evolucionará en los próximos años y qué medidas se están desarrollando para incrementar la percepción social de esa cultura de Defensa. Fuente explicó que los españoles en general, tienen “una elevada concepción de su sentido de identidad como españoles, pero una baja percepción de los temas de seguridad y Defensa”.
Quizá la falta de conocimiento sea uno de los factores que influyen, afirmó Fuente, en esa baja percepción y donde se centran los esfuerzos del Instituto.
Por último, consideró que la amenaza más importante de nuestra sociedad es el terrorismo internacional, seguido de los flujos incontrolados de población civil que, según Fuente, es otro de los asuntos que pueden ser visto como una amenaza por parte de los ciudadanos.