El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha comprometido con el de Ceuta,
Juan Vivas, a adoptar “soluciones inmediatas” ante la cantidad de menores que hay en la ciudad tras las
entradas masivas ocurridas en mayo. Tal y como ha explicado Juan Vivas a los medios, el Gobierno de la Nación ofrece un apoyo “explícito” para “activar cuantas capacidades y recursos” sean necesarios “para lograr el objetivo de retornar los menores a Marruecos de acuerdo a la interpretaciones que marque la
justicia”, ha indicado. La Ciudad ofrecerá todos los recursos que sean necesarios y el Estado se ha comprometido a intervenir en lo necesario. En concreto, el jefe del Ejecutivo de la Nación ha anunciado un triple refuerzo para un regreso seguro y ordenado de los menores, en tres ejes: el de las capacidades, el administrativo y el diplomático. Vivas ha agradecido a Pedro Sánchez su rapidez en la respuesta, lo que significa que este asunto es “prioritario”, amén de “la implicación personal”. “Es una cuestión de Estado y quiero que los ceutíes sepan que no estamos solos”. El presidente ha recalcado que siempre se pensó que se estaba actuando correctamente echando mano de un instrumento alternativo a la ley de extranjería por la excepcionalidad que se estaba viviendo con las entradas masivas. “Consideramos que ese instrumento jurídico era válido, era una vía más rápida en beneficio del interés del menor. Los jueces nos han dicho que no, pero pensábamos que se hacía bien”. Tanto el Estado como la Ciudad mantienen que el objetivo es retornar a los menores a Marruecos, poniendo todos los recursos para, de acuerdo a la interpretación judicial, se lleve a cabo en el menor tiempo posible. “Cuantos más medios se pongan para la resolución de los expedientes individuales antes se podrá terminar”, ha aclarado Vivas, que tiene el compromiso de obtener recursos para atender cada caso con todas las entrevistas a menores que sean necesarias, al objeto de ir cumpliendo lo que determina la justicia que hay que hacer con cada uno de los niños. El auto del Contencioso “nos da pistas” sobre cómo se tienen que hacer los procedimientos de retorno para que cuenten con el respaldo legal. “Respetamos y aplicamos” lo que diga la Justicia que marca el camino sobre cómo tienen que actuar las administraciones.
La situación en Ceuta “es insostenible”, ha aclarado Vivas. “Los menores no están en las debidas condiciones, están en lugares temporales y un porcentaje en la calle, pero esta situación es insostenible porque es una ciudad pequeña, de 20 kilómetros cuadrados y que está acogiendo al 10% de todos los MENA que hay en España. Es como si en Madrid, aparecieran 40.000 menores de un día para otro”, ha ejemplificado. El presidente de la Ciudad de Ceuta, Juan Vivas, ha recordado en su intervención cómo en mayo se vivió uno de los momentos más difíciles de su historia, con la entrada de miles de marroquíes. “El ánimo de los ceutíes fue embargado de angustia e incertidumbre. Nos sentíamos al borde del abismo”, ha recordado, valorando el apoyo del Gobierno de la Nación, que “evitó el desastre” pero “dejó secuelas graves” como supone la permanencia de miles de personas, un 20% de los que entraron, entre ellos muchos menores. Ambos presidentes han coincidido en la necesidad de favorecer este regreso seguro y ordenado de los menores a su país de origen, especialmente con ocasión del comienzo del curso escolar, ya que su permanencia en Ceuta puede perjudicar enormemente su desarrollo educativo y aumentar su desarraigo familiar, ha informado Moncloa. Ceuta reaccionó de manera inmediata para habilitar dispositivos para la acogida provisional, pero han pasado tres meses y el problema no se ha resuelto. Fue cuando Ceuta pidió activar el acuerdo con Marruecos para el retorno de los menores suscrito en 2007, que nunca se había activado. El 13 de agosto se inició el retorno de menores, paralizándose esas repatriaciones por prudencia al hacer extensible lo contemplado en el auto del Contencioso para 9 marroquíes.
No hay discrepancias en el PP y respaldo a Marlaska
Respecto a discrepancias en el seno del PP, Vivas ha negado divergencias con Pablo Casado que siempre le ha trasladado que los “intereses de Ceuta” están por encima de cualquier otros, incluso de los del partido. “No veo ninguna contradicción”, ha insistido el presidente de la Ciudad, que mantiene que el PP sigue defendiendo el retorno de los menores a su país y hacerlo ajustado a la ley.
Sobre las responsabilidades en torno a las consecuencias de los retornos, Vivas ha destacado que “no voy a descargar el error en el procedimiento en el Ministerio de Interior o en la delegada del Gobierno” en cuanto a esa responsabilidad porque “no tienen la culpa. Yo conocía el procedimiento y estaba de acuerdo con él. Los fundamentos de ese procedimiento se han cumplido. El retorno fue asistido, los menores fueron objeto de tratamiento individualizado, el proceso estuvo garantizado por las autoridades españoles y marroquíes y por una institución solvente de Marruecos de la que no tenemos que dudar de su compromiso”, ha recalcado en alusión a la oenegé que recogió a los menores. No ha sido el ministro Fernando Grande-Marlaska el que activó el retorno sino que fue una petición de la Ciudad avalada por la Delegación del Gobierno. “Los retornos se han llevado de manera consensuada entre las dos administraciones, es una cuestión de Estado. Hemos actuado de manera conjunta. El auto ha provocado la paralización en las condiciones en que se llevaban a cabo los retornos, pero no para el retorno per se, ha dicho que se tienen que someter a determinado procedimiento. El Estado va a poner todas sus capacidades para llevar a cabo esos retornos. No vamos a hacer ningún retorno como los de antes que creíamos que estaban bien hechos. Como acatamos la resolución judicial y ante todo prima el interés del menor, vamos a seguir apostando por ello. Hay que cumplir con el reglamento de la ley de extranjería”, ha zanjado. El traslado a la Península no es opción porque “entendemos que la vía es el retorno para atender esa situación insostenible. No hay alternativa que resuelva mañana el problema. Insistimos en el retorno asistido. El traslado no es opción”.
La red española de Inmigración rechaza el retorno asistido que insisten en aplicar el Gobierno de España y Ceuta
La Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado rechaza frontalmente el abandono del Gobierno de España y de la Ciudad Autónoma de Ceuta en explorar otras vías humanitarias para dar solución y respeto a los derechos de los más de 700 menores que desde hace meses malviven en instalaciones insalubres e inadecuadas para su acogida. Así, en la reunión de hoy entre Pedro Sánchez y el Presidente de la ciudad autónoma de Ceuta, generada para intentar apuntalar la idea ilusoria de que es la Ciudad Autónoma la que puede solventar esta crisis, cuando el único competente para ejecutar deportaciones son los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado bajo orden expresa del Ministro del Interior se deniega explorar un nuevo reparto territorial (a pesar de que se tiene constancia de que hay ciudades y comunidades autónomas dispuestas a la acogida como Euskadi y Cataluña) y se comprometen medios humanos y recursos económicos solo para garantizar la expulsión de los menores, lo que no mejorará mientras dure ese proceso de instrucción, ninguna de las necesidades educativas, asistenciales y terapéuticas de los menores actualmente tutelados o en situación de tránsito. Se quiere recordar que se adopte la medida que se adopte seguirá siendo el Ministerio del Interior el único capaz junto con el Ministerio de Integración capaz de activar el tratado internacional para su retorno a Marruecos y que para ello hará falta una orden o instrucción del Ministro competente en materia de fronteras (Ministro del Interior) puesto que la actual está recurrida y bajo estudio de la Audiencia Nacional. A juicio de la Red este pacto entre el PSOE y el Partido Popular a través de sus presidentes en la ciudad autónoma y el Gobierno de España solo supone un acuerdo para la expulsión que cumple con las expectativas de la extrema derecha y que viene a atacar a los menores migrantes y vulnera sus necesidades inmediatas.