La Delegación del Gobierno en Ceuta insiste en que la Policía Nacional nunca ha dejado de prestar cobertura de seguridad a través de la UIP a los autobuses, en concreto a la Línea 8 que le fue encomendada.
Así lo ha recalcado este miércoles la delegada Cristina Pérez dando una versión que choca con la realidad que se produjo este pasado fin de semana y la que se repite desde el apedreamiento del sábado: el autobús no entra en el Príncipe porque no hay escolta.
Insiste en que desde la Jefatura Superior se presta ese servicio con la UIP, pero no se dan horarios por cuestiones de seguridad.
“Nunca hemos dejado de adoptar” esa cobertura. “Cuando se produjeron estas cuestiones” de inseguridad “se nos requirió por Policía Local para hacer un dispositivo de seguridad en el Príncipe, se asignaron líneas para Policía Local y Nacional. En el caso de Policía Local no voy a entrar en que su jefe, consejero o quien proceda haya decidido anular el servicio, pero la Policía Nacional sigue prestándolo en la línea 8”, ha recalcado en una rueda de prensa.
El hecho es que el autobús no entra en el barrio porque no hay escolta, como pudo verificar este medio el pasado domingo. A las seis de la tarde accedió, a las siete ya no porque es a partir de esa franja horaria cuando se producen más incidentes. No estaba la Policía y el conductor, por seguridad, no accedió al barrio.
Pérez no obstante se mantiene en la versión oficial. “No podemos restablecer un servicio que nunca hemos quitado. Desde que se dijo que se debía apoyar, nosotros prestamos el servicio. Atendiendo a criterios, no soy técnico en la materia, se le asignó la vigilancia de la línea 8 y puede comprobar que se presta el servicio. Nunca se ha quitado, decidimos que debía seguir. La línea 8 va acompañado de la Policía Nacional”.
Desde la asociación de vecinos se deja claro que hasta ayer mismo por la tarde seguía sin haber escolta, por lo que el bus no entra en el barrio. La misma versión que dan los trabajadores. La Jefatura Superior no ha dado aún respuesta a este medio para aclarar qué está pasando.