El 19 de abril de este año la Guardia Civil conseguía
abortar un intento de pase de drogas a plena luz del día y en la playa del Sarchal, en Ceuta. La movilización de las distintas patrullas del Instituto Armado llevó a la detención de tres varones, uno menor de edad, y el decomiso de algo más de cien kilos de
hachís repartidos en fardos. No fue tarea fácil, hubo intento de escapada y acometimiento contra los agentes con tal de escapar del lugar. Ahora, tres meses después, el Ministerio Fiscal ha solicitado la apertura de
juicio oral ante la Audiencia formulando acusación contra los dos adultos para los que solicita nada menos que la imposición de 10 años de cárcel. El adolescente detenido ya fue condenado por el
Juzgado de Menores.
Los hechos se produjeron a plena luz del día en ‘la piscina’ del Sarchal
Para el Ministerio Público, los llamados A.M.M. y J.F.N.O. son responsables de un delito contra la salud pública y otro de atentado. Ambos fueron arrestados en la zona conocida como ‘la piscina’ del Sarchal, convertida en un punto de abastecimiento de combustible a narcolanchas además de salida y recogida de hachís. Ese 19 de abril, la Guardia Civil sorprendió a los acusados a bordo de una semicabinada a motor cuando arrojaban a la playa varios paquetes que contenían hachís y kifi. En el arenal esperaban varias personas para recoger la mercancía, lo hacían en unos momentos de cierre de frontera en los que el hachís tenía que sortear otras vías de entrada, bien a través de narcodrones, con motores humanos o bien de esta forma. En el arenal se pudo detener solo al menor, mientras que los dos acusados intentaban escapar ignorando los avisos realizados por la patrullera oficial del Servicio Marítimo que ordenaba que cesaran. Lejos de detenerse llegaron a golpearles provocando daños que fueron tasados en más de 2.500 euros, según la información judicial a cuyo contenido ha tenido acceso El Faro de Ceuta.
Los acusados descargaron más de 100 kilos de hachís en el arenal
Para la Fiscalía ambos son autores de un delito de tráfico de drogas por el que pide 6 años de cárcel a cada uno y otro de atentado, por el que reclama la imposición de otros 4.
En el caso del menor de edad ya fue condenado a cumplir medida de internamiento semiabierto durante 12 meses, los 3 últimos en libertad vigilada. Todo ello después de haber sido presentado ante la autoridad judicial tras su permanencia inicial en Punta Blanca. Los adultos están en prisión preventiva desde el día en el que fueron arrestados por los integrantes del Instituto Armado.