La
Cofradía del Santísimo Cristo de La Encrucijada y Santa María de Las Lágrimas ha realizado en la noche de este viernes su tradicional Vía Crucis desde la
Santa Iglesia Catedral hasta la Iglesia de África, donde ha realizado su estación. Más tarde, ha vuelto de nuevo a la Catedral de Ceuta donde la cruz ha sido tapada con una manta. Un recorrido que se ha recuperado tras dos años de pandemia en los que los devotos se quedaron sin poder celebrar los cultos como las imágenes se merecían. Asimismo, la Hermandad celebrará este sábado, a las 21.00 horas, una eucaristía en la Santa Iglesia Catedral por todos los fallecidos por la pandemia que estamos padeciendo, especialmente los de nuestra ciudad, pero también por las
víctimas de la guerra entre Rusia y Ucrania. Los actos finalizarán el domingo, a las 11.00 horas, con una función principal de instituto, una Sagrada Eucaristía Solemne por todos los integrantes de la hermandad.
Cabe recordar que el pasado jueves, la
nueva Junta de Gobierno de la Hermandad juró su cargo, con Pedro Mariscal al frente como Hermano Mayor. Este equipo lo conforman: Lucas Artesero Caballero; Francisco Jerónimo Blanco Veira; Tomás León Campoy; Diego Guerra Benítez; Juan Antonio García Ramos; Rafael Jiménez Villalba; Francisco José Méndez García; y Antonio Ángel Noya Díaz.
Sus primeras reglas se aprobaron en 1953
Una
hermandad que nació en 1951. Sus primeras reglas se aprueban en 1953 y tiene como sede canónica la Iglesia Parroquial de San José, en la barriada de Hadú. El Santísimo Cristo de la Encrucijada es la única imagen de nuestra Semana Santa tallada en Ceuta. Su autor fue el reconocido escultor de Reus (Tarragona) Modesto Gené Roig (1952). En 1992 el sevillano Miñarro López le aplica nueva policromía. La Dolorosa de Las Lágrimas es igualmente obra de Modesto Gené, siendo realizada en Reus (1951). Juan Ventura la restaura en Sevilla, encarnándola y tallándose manos nuevas en 1993.