En un edificio con 12 pisos, habitado en la práctica totalidad por personas mayores, jubiladas, viudas... y sin ascensor durante ya una semana. Así se encuentran los vecinos de
las casas militares de la torre situada en el inicio de la Avenida España, una situación verdaderamente muy difícil porque al ser de avanzada edad el ascensor es fundamental en sus vidas. La avería, que se produjo el pasado jueves, está provocando numerosos problemas a los habitantes de estas casas. Principalmente afecta en aquello que más puede influir en una persona: no salir a la calle. Y es que al no funcionar el ascensor, no pueden salir de sus domicilios porque bajar las escaleras, a sus edades, es un riesgo. Aquellos que viven en los primeros pisos pueden intentarlo, así como los que viven en el piso más alto -porque pueden pasar por la azotea al edificio de al lado, donde allí pueden coger el ascensor-, pero los que viven en la mayoría de las casas, dos por piso, no se pueden mover al no poder bajar ni subir en el ascensor. Las casas son muy antiguas, pero si el ascensor funcionara, no habría problema. Los vecinos de estas casas militares piden soluciones urgentes para que puedan salir ya a la calle, porque sin ascensor lo tienen prácticamente imposible. Han llamado, por supuesto, al servicio técnico, que se remiten a comunicarles que ya han pedido la pieza. Ahí, por ahora, se quedan la cosas. No hay novedad, no hay pieza nueva. Cuando se comunica al
Invied (Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa), propietario del edificio, se remiten también al servicio técnico. Mientras tanto ha pasado una semana, con los inconvenientes que lleva para estas personas mayores, y el ascensor sigue estropeado. Los vecinos entienden que el ascensor pueda fallar, pero no que dure tanto su reparación. Y recuerdan un peligroso precedente que no quieren repetir, cuando en las navidades de 2018 ya estuvo el mismo ascensor un mes sin funcionar, sin que se dieran soluciones para que en esas fechas se pudiera disfrutar de forma cómoda. Sin ascensor, muchos de los vecinos no pueden salir a la calle. Se tienen que quedar en sus casas en una especie de 'confinamiento' obligado.