En la frontera, “oportunidad, congruencia y proporcionalidad”

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado actúan en el desempeño de sus funciones “siempre de acuerdo con los principios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad”, según pone de relieve el Gobierno central en su respuesta a dos preguntas del diputado de Amaiur Jon Iñarritu, que interpeló al Ministerio del Interior para saber “qué instrucciones ha dado o elaborado para aplicar el nuevo régimen fronterizo de Ceuta y Melilla que entró en vigor en abril”

y para conocer si se ha hecho “un nuevo protocolo con instrucciones a la Guardia Civil sobre cómo efectuar los ‘rechazos en frontera’ de inmigrantes en las vallas de las ciudades autónomas”.
Según la contestación el Ejecutivo de Rajoy, a cuyo contenido ha tenido acceso ‘El Faro’, la actuación de las Fuerzas de Seguridad “se desarrolla velando en todo momento por la seguridad de las personas y con el respeto de los Derechos Humanos, facilitando en los casos en los que la ley lo determine el acceso a la protección internacional”.
“España, como Estado soberano e integrante de la Unión Europea”, recuerda el Gobierno de España, “tiene la obligación de vigilar y proteger sus fronteras, que se deriva del Derecho comunitario a través del Código de Fronteras Schengen y del nacional por la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y tiene entre sus objetivos impedir el cruce por puntos no habilitados al efecto de las fronteras”.
La respuesta recuerda que la Ley Orgánica sobre Derechos y Libertades de los Extranjeros en España y su Integración Social “establece el régimen especial para las ciudades de Ceuta y Melilla” y que la disposición sobre el ‘rechazo en frontera’ ha sido objeto “de debate parlamentario” y de “diversas reuniones y contactos entre representantes de distintos organismos e instituciones, estando entre ellos el comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa”.
Para terminar, el Gobierno de la Nación destaca que la mencionada disposición “hace explícita la garantía del respeto a la normativa internacional en materia de Derechos Humanos y, específicamente, de la reguladora del derecho de asilo y de la protección subsidiaria”.

El papel de las oficinas abiertas en Ceuta y Melilla

El Ministerio del Interior ha hecho hincapié en su respuesta a Iñarritu en que la disposición adicional introducida recientemente por la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana “señala que independientemente de la desestimación de la entrada de quienes traten de acceder irregularmente en territorio nacional, podrá serles reconocida la condición de refugiado o la protección subsidiaria en los lugares habilitados al efecto en los puestos fronterizos, de acuerdo con la normativa reguladora de las solicitudes de protección internacional en frontera”. Hasta ahora en la oficina del Tarajal no se ha tramitado ninguna petición.

La Comisión Europea, atenta al marco jurídico fronterizo

El comisario europeo de Migración, Asuntos Internos y Ciudadanía, Dimitris Avramopoulos, que iba a visitar Ceuta en primavera, primero, y a finales de junio, después, ha asegurado a la eurodiputada socialista Elena Valenciano que la Comisión Europea “ha seguido el curso de la legislación española relativa al establecimiento de un régimen especial en Ceuta y Melilla” y que “se mantiene en contacto con España para garantizar que el marco jurídico nacional y su aplicación se ajustan a las normas dispuestas por el Derecho de la Unión”.
“Si bien los Estados miembros tienen la obligación de evitar el cruce no autorizado de las fronteras”, advierte el griego, “el control de estas debe ejercerse de manera proporcionada y sin perjuicio de los derechos de los refugiados y de las personas que solicitan protección internacional, en particular en lo relativo a la no devolución y a la garantía de posibilidades reales de acceder al procedimiento de asilo”.
Avramopoulos también ha recalcado que “los Estados miembros también deben cumplir las salvaguardas mínimas previstas en la Directiva sobre el retorno para los asuntos de frontera, sobre todo el respeto del principio de no devolución, limitaciones del uso de medidas coercitivas y determinados derechos fundamentales”.
La Comisión considera “una novedad positiva” la creación de oficinas para las solicitudes de protección internacional en las fronteras de Ceuta y Melilla pero cree que “será necesario velar por que los pasos fronterizos sean accesible en la práctica para que los solicitantes de protección internacional puedan presentar sus solicitudes sin tener que saltar la valla fronteriza”.