Emotivo San Fernando con despedida

El jefe del RING-7, José Ignacio Robles, manifestó que ha sido “un honor” servir las órdenes de José Manuel Sanz Román, quien se marcha próximamente, y felicitó al personal de Ingenieros y Transmisiones que ayer recibió condecoraciones y premios del Arma

El 30 de mayo de 1999, el entonces comandante general de Ceuta, Fernando López de Olmedo, inauguraba la Plaza de Armas ‘España’ del Acuartelamiento ‘El Jaral’ en la festividad de San Fernando, Patrón del Arma de Ingenieros, Transmisiones y del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos (Construcción, Telecomunicaciones y Electrónica). Ayer, 16 años después, el ahora jefe de la plaza,  José Manuel Sanz Román, presidía el acto de celebración de la festividad que consistió en una parada militar que tuvo sabor a despedida ya que se marcha próximamente. Por ello, el coronel jefe del RING-7, José Ignacio Robles, le dedicó unas palabras por el tiempo que ha estado al mando de la Comandancia General de Ceuta.
“Mi general, esta es la última oportunidad en la que como comandante general preside un acto militar aquí en el Jaral, y qué mejor oportunidad que la celebración del día grande de aquellos que con los castillos o arcos de puente en las solapas, honramos a nuestro Patrón. Para todos nosotros ha sido un honor servir a sus órdenes y le deseamos que, junto con su esposa, Cristina, tenga toda la suerte de parabienes en esta nueva etapa que ahora comienza”, manifestó.
Además, le expresó su agradecimiento “por el honor que nos hace al personal de las especialidades fundamentales de Ingenieros y Transmisiones y de las ramas de Construcción, Telecomunicaciones y Electrónica del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos presidiendo esta ceremonia”.
En cuanto al Patrón, el coronel jefe manifestó que “además de su carácter militar, San Fernando actuó en el campo de la organización y la ciencia, anteponiendo la conciencia moral frente a otras razones, lo que le perfila como ejemplo a seguir por aquellos que debemos combatir con las armas y con nuestro trabajo técnico y especializado”.
José Ignacio Robles felicitó al personal de Ingenieros y Transmisiones que recibió ayer las condecoraciones. “Los aquí presentes hemos compartido vuestra emoción de la misma manera que este último año, día de día hemos sigo testigos de los esfuerzos y sacrificios que os han hecho merecedores de las menciones y medallas recién entregadas”, afirmó.
En la parada militar participaron la Escuadra de Gastadores del RING-7, la Banda de Guerra de la Comgeceu, la Unidad de Música del Batallón del Cuartel General de la Comgeceu, el Estandarte del Regimiento de Ingenieros nº7 y un Batallón Mixto (Plana Mayor del BZ I/7, Compañía de PLMS del BZ-I/7, Compañía de Zapadores del BZ-I/7, Compañía de Apoyo del BZ-I/7 y Compañía de Transmisiones 17).
En el acto también se llevó a cabo la imposición de condecoraciones y la entrega de premios del Arma de Ingenieros. Es tradición, con motivo de la festividad del Santo Patrón, que el inspector del Arma de Ingenieros y Transmisiones, a propuesta de la Junta de Premios, conceda al personal de estas especialidades fundamentales unos premios, que tienen por finalidad el fomento de la instrucción específica; prestar apoyo, reconocimiento y aprecio a quienes hayan sufrido lesiones en campaña, ejercicio o cualquier otro acto del servicio; y premiar y estimular la buena conducta, subordinación y disciplina, y premiar los trabajos que contribuyan a potenciar el prestigio del Arma y sus componentes.
Así, se entregó el Premio Gaspar Diruel, al personal de tropa que ha destacado por buena conducta, subordinación y exacto cumplimiento de la más rigurosa disciplina; el Premio Marvá, a los componentes de la Patrulla o equipo que han destacado en el desarrollo de un tema de carácter específico de la Unidad; y el Premio ‘Español Benéfico’, al personal de tropa que ha padecido lesiones importantes, en el último año, como consecuencia de operaciones, accidente en maniobra o en acto de servicio.
Después de esta entrega de condecoraciones se llevó a cabo la alocución del coronel jefe del RING-7 y seguidamente el acto de homenaje a los que dieron su vida por España, “homenaje a los soldados de todos los tiempos, encuadrados en los ejércitos de España, que un día lucharon con valor, sirvieron con lealtad y murieron con honor”.
Para finalizar, los militares cantaron el himno de Ingenieros, se retiró el Estandarte y se llevó a cabo el desfile a pie de la fuerza.
El acto contó también con la presencia de una representante de la Ciudad Autónoma, en este caso la viceconsejera de Educación en funciones, Rocío Salcedo, “haciendo con ella patente la vinculación de esta ciudad con sus Ingenieros”.