Denuncia que "sindicalistas palmeros" los "abandonaron a su suerte" y ahora los menosprecian para defender al jefe superior. La revolución sindical organizada en torno a la Jefatura Superior de Policía, con peticiones de cese del jefe superior por un lado y proclamas en su defensa, por otro, ha dado un nuevo giro con el posicionamiento público mostrado por el SUP.
En un comunicado remitido ayer por el Comité Territorial del sindicato, que es mayoritario en la Policía Nacional, se ha querido mostrar públicamente el posicionamiento en relación a los últimos acontecimientos. El primero, la situación que atraviesan los componentes de UDYCO-Delincuencia Organizada, que tuvieron que presentar su dimisión ante el trato recibido. "Como no puede ser de otra manera, queremos expresar nuestro reconocimiento y apoyo a los compañeros de UDYCO que presentaron su renuncia por una cuestión que consideraron de dignidad, al sentirse menospreciados por parte de esta Jefatura. Algo que nada tuvo que ver con su labor profesional, altamente elogiada hasta el día de autos, y que ahora no deben de convertirse en arma arrojadiza para defender a este jefe superior en su gestión y mucho menos por los sindicalistas palmeros que los abandonaron a su suerte, teniéndolos que acoger otros sindicatos ya que el que pertenecían se negó a pedir explicaciones a jefe alguno y a solicitar que se aclarasen las circunstancias de tales hechos", expone el SUP.
"Tomen nota el resto de afiliados de este sindicato, que vagan por las dependencias en parejas cual testigos de Jehová y que, prometiendo medallas, invitando a cervezas, comprando aires acondicionados a la Jefatura, así como ofreciendo colocaciones varias, por su proximidad con el mando, a la hora de la verdad te dejan TIRADO y a las pruebas nos remitimos", añaden. "Ahora se excusan en que los escritos vergonzantes donde se cuestionan a los compañeros y su profesionalidad vienen directamente desde Madrid, lo cual todavía es más grave, pues depende de un personaje a 800 Kilómetros el que se te defienda o no. Algunos, está claro, olvidaron hace tiempo cuál es la labor sindical, que no es ni más ni menos que defender a los compañeros ante situaciones que consideren arbitrarias e injustas y que es para lo que se crearon, no sin esfuerzo", puntualiza.
El SUP se refiere claramente, aunque sin citarlo, a la UFP, pero también hacen mención específica a otro sindicato, el de los mandos, que ha terminado por 'meterse' en este maremágnum. "Otro asunto es el sindicato de jefes lo cual es más normal, es su trabajo de alguna manera, puesto que el buen o mal funcionamiento de esta Jefatura no es solo achacable al jefe superior, de ello también son copartícipes muchos de los mandos que le son afines, de los cuales algunos, tras su rotundo fracaso, ya han puesto pies en polvorosa con las orejas gachas dejando tras de sí un caos y descontento absolutos, claro está recogiendo sus frutos en forma de medallas, puestos a dedo que no les correspondían y demás prebendas", expone.
"Aclarado este punto no es necesario menospreciar el trabajo de unos compañeros para realzar la labor de la Jefatura, la cual es perfectamente defendible desde criterios de objetividad y estadística, aunque difícilmente asumible desde el malestar que se viene percibiendo en cada una de las dependencias de la misma. Los números pueden ser más o menos aceptables, incluso se pueden justificar, pero el malestar en toda la Jefatura con la gestión de este jefe superior es vox populi, sin entrar a valorar el trato dispensado a los representantes sindicales que hemos osado a alzar la voz, en su momento fue el SUP al que ha costado hacerse respetar, y en la actualidad la CEP, que ha osado levantarla en las últimas fechas", lamenta.
Sobre la postura de la Confederación de Policía, el SUP concreta que respetamos profundamente sus motivaciones para pedir el cese del jefe superior, "pues algunas de sus argumentaciones nos son cercanas e incluso parecen copiadas de situaciones vividas por parte de representantes de este comité, pero la situación política de provisionalidad en nuestro país, así como el cambio de actitud por parte de esta Jefatura para con esta institución hacen a nuestro modo de ver que las circunstancias no son las propicias para fomentar un cambio en la Jefatura, independientemente de las motivaciones de nuestros compañeros de la CEP".
A juicio del SUP, cuyas riendas en Ceuta lleva Jesús González Miaja, la verdadera realidad de este maremágnum mediático y el porqué aprovechan otros actores esta situación para entrar a posicionarse a favor o en contra del jefe superior, "no es más que el trasfondo existente en la nueva distribución de efectivos en la próxima apertura del 'Tarajal II', donde esta Jefatura se ha mostrado inflexible en la defensa de la Policía Nacional y de la legislación existente, y que sistemáticamente se ha venido incumpliendo, realizando la Policía Nacional labores en el tránsito de mercancías que no son de su competencia y que tras numerosas reuniones en las más altas instancias por parte de esta Jefatura Superior, llegando incluso a la Secretaría de Estado de Seguridad, y no sin resistencia, van a retornar a sus legítimos concesionarios por ley, si antes de su apertura no es cesado su titular y sustituido por otro más complaciente, que permita, como hasta la fecha, que la Policía Nacional siga ejerciendo de ordenador de colas, control de mercancías y demás gestiones aduaneras que no son de su competencia. Esta es una vieja reclamación de este sindicato muy demandada por los funcionarios que han sufrido durante años las miserias de realizar un servicio que no es de nuestra competencia y que finalmente parece que va a retornar a quien le corresponde por ley", explica, en alusión, aunque sin citarlo expresamente, a la Guardia Civil.
Desde el SUP, "hemos discrepado y reivindicado hasta la saciedad con esta Jefatura Superior y lo seguiremos haciendo cuando consideremos que se dan situaciones injustas, defendiendo a nuestros afiliados y a los que otros dejaron en la estacada hasta el final, pero en ningún caso vamos a contribuir en argumentaciones y movimientos que enmascaren finalidades que terminen perjudicando a otros compañeros y a la Policía Nacional", sentencia.