El PP espera elevar al Pleno en un mes un nuevo reglamento de la Asamblea

El Gobierno local ha encontrado  afinidad en los dos grupos mayoritarios en la oposición, PSOE y Caballas, para modificar el reglamento de funcionamiento de la Asamblea.

Este miércoles la comisión especial que se ha creado  para reformar esta normativa ha celebrado su sesión constitutiva y en una semana se volverá a reunir para trabajar sobre el documento base que ya ha elaborado el Gobierno, según ha explicado la consejera de Hacienda y portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Susana Román. “Hay predisposición y puntos de consenso importantes con ambas formaciones”, subraya para precisar que esa circunstancia redunde en una agilización de los trabajos de esta comisión, en la que hay un representante de cada uno de los cinco grupos parlamentarios de la Asamblea. “El calendario con el que vamos a trabajar implica que la semana que viene tengamos una nueva reunión, ya con un esbozo del documento, y esperamos las aportaciones de cada partido”, explica. De esta forma se espera que en el plazo de un mes a lo sumo se pueda plantear al Pleno de la Asamblea un texto para su aprobación y de manera que el reglamento reformado entrara en vigor cuanto antes.

Oposición
De momento, tanto PSOE como Caballas ya han adelantado al Gobierno cuáles son sus líneas maestras en esta modificación, que supondrá, entre otras cosas, que las sesiones plenarias ordinarias se dividan en dos jornadas, una de ellas dedicada íntegramente a la labor de control al Gobierno y el resto a las propuestas ordinarias del Ejecutivo y los grupos de la oposición.“Hay un consenso ya establecido con los dos principales partidos de la oposición sobre la regulación de las sesiones plenarias”, subraya Román, que se acuerda de las sesiones maratonianas de los últimos Plenos ordinarios, que como el de julio, duraron casi 14 horas. “Nadie después de esa gran cantidad de horas está despejado para seguir trabajando”, añade. “De lo que se trata es de que ese funcionamiento anormal se pueda corregir”.
A juicio de la portavoz y consejera al haber más plenos en un mes “se presupone una una mayor participación de los grupos políticos, y consiguientemente deben suponer una restricción al número de sesiones plenarias extraordinarias que puedan solicitarse”, que se propone quede reducido a “un máximo de una al mes”.   
Y tras las experiencias vividas en la legislatura anterior Fátima Hamed, primero, y Rachid Ahmed, después, como diputados no adscritos, el PP también considera conveniente “modificar los preceptos en los que se regulan los derechos de participación política de los Diputados no adscritos”, reordenar el régimen de retribución o indemnización de los diputados, aclarar el régimen de desempate en votaciones como las de la Vicepresidencia Segunda de la Asamblea, la asignación de medios materiales, humanos y económicos a los Grupos Políticos, la introducción en el Reglamento de la Asamblea de un apartado que regule las relaciones con el Gobierno de la Ciudad, rectificaciones de errores materiales, así como “cuantas otras surjan del debate en el seno de la Comisión Especial” .

No más plenos de 10, 12 o 14 horas de duración

La experiencia del pleno ordinario del mes de julio no pudo ser peor. Y es que la Asamblea tiene en esta legislatura cinco grupos políticos formulando propuestas, mociones de urgencia e interpelaciones. En total, fueron unas 14 horas casi ininterrumpidas. Los diputados se sentaron a las 9 de la mañana, hicieron pausa para el almuerzo, reanudaron la sesión a las seis de la tarde y de ahí hasta las once de  la noche, dejando fuera las interpelaciones, que se iban a contestar por escrito. “Eso no es operativo de ninguna manera”, subraya Román. En el hecho de acortar las sesiones plenarias está de acuerdo en términos generales todos los grupos de la Asamblea, que de una u otra forma ya han expresado la necesidad de un cambio que solo puede formalizarse a través de un nuevo reglamento.