El pasado tenebroso de Rubalcaba

Rubalcaba, vuelve a situar el odio y las mentiras contra el Partido Popular como principal arma arrojadiza, agitando la bandera de la división y de avivar la animadversión con tal de sacar un voto "a base de engañar a los españoles". En la campaña catalana Rubalcaba ha dicho que el Partido Popular inventó la "catalanofobia", sin darse cuenta que la "catalanofobia" es que haya 900.000 parados en Cataluña. Rubalcaba que tienen la responsabilidad en el Gobierno de cuidar de la seguridad de todos, de defender la libertad de todos, dice que saben todo lo que hacemos y que escuchan todo lo que decimos, es el que vuelven a "sembrar la discordia", que es lo que ha  hecho el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero desde que llegó al poder.
Rubalcaba fue portavoz del gobierno del ex-presidente González que se ha colocado él mismo en la X de los GAL, negó repetidas veces que el gobierno socialista estuviera implicado en el terrorismo de Estado con los GAL.
González admite que recibía información sobre operaciones ilegales y que su gobierno contemplaba como posibilidad el asesinato. En palabras de González “Llegó hasta mí una información, que tenía que llegar hasta mí por las implicaciones que tenía. No se trataba de unas operaciones ordinarias de la lucha contra el terrorismo”. “En aquel momento solo cabía la posibilidad de volarlos a todos juntos en la casa en la que se iban a reunir”. Califica al secuestrado Segundo Marey como “detenido”.
González afirma que su gobierno, del que formó parte Rubalcaba, aceptaba el manejo ilegal de los fondos reservados. “Si tienes un volumen de fondos reservados, la utilización de los mismos es la legalización de un comportamiento ilegal, es la autorización de un uso ilegal del dinero público”.
Rubalcaba debe explicar si comparte la rebeldía de González contra las sentencias firmes condenatorias del Tribunal Supremo de miembros del gobierno que compartieron. “Estoy seguro de que Galindo era inocente” (de los delitos por los que fue condenado a 71 años de prisión). “Ninguno (Barrionuevo y Vera) estuvo implicado en ningún asesinato. Ninguno. En el secuestro de Segundo Marey..., es mentira”.
González sigue practicando el cinismo que caracterizó sus gobiernos de los que formó parte Rubalcaba: Afirma que no conocía a Luis Roldán, su Director de la Guardia Civil: “yo no le conocía, no tenía trato con él”. Afirma que no tiene dinero, luego dice que gana 5.000 euros netos, se olvida de su sueldo vitalicio de 60.000 euros por ser expresidente y silencia su relación con un empresario mexicano considerado el más rico del mundo. Admite que hay muchas cosas que no puede contar porque “en el poder las relaciones son subterráneas: las cuatro quintas partes, como en el iceberg, no se ven”.
“González ha reconocido que existió guerra sucia contra el terrorismo, que se llevaba desde el gobierno y que su presidente era el máximo responsable”. “Contra ETA no caben atajos: ni guerras sucias ni ilegalidades”
En 2004 Zapatero presumió de que lograría una solución al conflicto del Sahara en seis meses. En 2010 Zapatero está desaparecido. En su primera visita a Marruecos, el 24 de abril de 2004, Zapatero se mostró convencido de que "se pueden armonizar los derechos de las partes mediante el diálogo y llegar a un gran acuerdo" en el plazo de seis meses.
La política exterior de Zapatero condena a España a la debilidad internacional. El gobierno socialista defiende los derechos humanos donde no están en peligro y se esconde cuando se ponen en cuestión. Zapatero cambió unilateralmente la tradicional postura de “neutralidad activa” sobre el conflicto del Sahara, mantenida por España desde 1977 como parte del consenso de la Transición.
En los últimos días, Rabat ha expulsado a tres parlamentarios autonómicos y a un eurodiputado español sin que Jiménez reaccione. El gobierno de Zapatero permanece callado ante la censura informativa impuesta por las autoridades marroquíes a un grupo de periodistas españoles, impidiéndoles viajar a El Aaiún.
El caos interno del gobierno de Zapatero perjudica la política exterior de España. La descoordinación del gobierno socialista provoca que España tenga hoy una posición débil y laxa ante el conflicto del Sahara: El gobierno debe aclarar si su posición es la que dice el ministro Jáuregui, la que dice la ministra Jiménez, o ni una ni la otra.
La política de comunicación socialista es aún peor después de la última crisis de gobierno: La versión del gobierno expuesta por Jáuregui en el Congreso fue desmentida unas horas después por Jiménez a 9.000 kilómetros de Madrid.
La improvisación del gobierno socialista deja a España sin voz ni posición oficial: La ministra de Exteriores sigue de reuniones con Evo Morales y Rafael Correa y el gobierno manda a Moratinos, que ya no tiene cargo oficial, a Argel.
Una vez más, la irresponsabilidad de Zapatero afecta a la imagen exterior de España y a nuestras relaciones internacionales: Zapatero decidió acabar con la posición de neutralidad activa que España tenía desde 1977 y que formaba parte de los consensos de la Transición. España es legalmente la potencia administradora del Sahara Occidental y el gobierno mira para otro lado ante las últimas acciones de Marruecos.