Sus 25 ocupantes pusieron ayer por la tarde rumbo a Melilla, última parada de un viaje de 6 días por el norte de África.
El Puerto de Ceuta recibió ayer al megayate privado Michaela Rose, un crucero exclusivo con 13 pasajeros a bordo de nacionalidad británica y estadounidense y una tripulación de 12 personas. Hicieron escala en nuestra ciudad para realizar labores de avituallamiento, mientras el pasaje disfrutaba de un paseo turístico. En la tarde de ayer, sobre las 20:00 horas, el Michaela Rose zarpó en dirección a su próxima escala, la ciudad autónoma de Melilla, última parada de un viaje de seis días que terminará en Gibraltar desde donde partió.
La embarcación atracó en el puerto a primera hora de la mañana procedente de Tánger. El pasaje desembarcó y dedicó gran parte de la jornada a visitar Ceuta y sus alrededores. Mientras tanto, la tripulación puso a punto el Michaela Rose para su próxima travesía que ya está realizando por la costa marroquí hasta la ciudad de Melilla. El megayate atracó en el Muelle España durante toda la jornada de ayer para las labores de avituallamiento y aprovisionamiento de agua, 25 tons, así como la descarga de basura, indicaron desde la Autoridad Portuaria de Ceuta.
Características del buque
Desde el ente portuario destacaron que el Michaela Rose es un megayate o crucero exclusivo “con una línea elegante y amplio espacio con sus cubiertas de madera de teca”. Tiene una capacidad para alojar a 16 huéspedes en sus “lujosas cabinas” y espacio para la tripulación. El Michaela Rose tiene previsto volver a la ciudad autónoma en dos semanas.
El Michaela Rose fue construido en los astilleros alemanes de Bardenfleth y se entregó en el año 1984. La última reforma se realizó en 2008. Cuenta con un casco de acero y aluminio y destaca por su sistema de estabilización que reduce el balanceo del movimiento, lo que le hace un crucero más agradable y suave en la navegación, subrayó la Autoridad Portuaria.
De matrícula británica (Southampton) tiene casi 30 metros de eslora y un calado de 3,10 metros. En alta mar alcanza una velocidad máxima de 16 nudos.