Categorías: Sucesos y Seguridad

“El lunes les llevamos comida y el martes se la quitaron”

La situación, al otro lado de la valla, empeora para los poco más de 30 inmigrantes que sobreviven en los montes.

Cada vez son menos los inmigrantes que malviven en los montes, al otro lado de la valla. Muchos han preferido huir de estos asentamientos; otros sencillamente han sido rechazados en batidas. Los hay, unos pocos, que pueden pagar su espera en una vivienda, en un particular piso patera.
A las denuncias que acostumbramos a conocer sobre su situación se suman otras que, por crueles, cuesta asimilar. La voz del arzobispo de Tánger, Santiago Agrelo, es clave para su difusión. Esta misma semana, la Iglesia repartía alimentos que duraban bien poco, ya que 24 horas después les fueron arrebatados por los agentes marroquíes. “El lunes se los llevamos, el martes se los quitaron. La Policía entró en el bosque de Beliones para llevarse lo poco que tienen para subsistir”, denuncia el religioso en un artículo colgado en la web Religión digital, y del que ayer se hico eco este periódico.
“¿Qué dirían ustedes de una sociedad que persiguiese a hombres, mujeres y niños vulnerables e indefensos -a los que leyes inicuas han hecho ilegales, irregulares, clandestinos-, los acosase como si fuesen alimañas, los persiguiera como si fuesen criminales, los golpease como no se permitiría hacer con los animales, y los cercase para rendirlos por hambre? Se diría que esa sociedad se había deshumanizado, corrompido, embrutecido, envilecido, degenerado”, se lamenta Agrelo.
Son preguntas que no hacen sino dibujar la realidad que se está viviendo en los montes fronterizos. Los protagonistas confirman punto por punto las manifestaciones del arzobispo. Al robo de comida se añade el de otros materiales que puedan tener, amén del acoso al que se ven expuestos si aparecen por la carretera de Tánger para pedir alimento, como siempre han hecho. Ahora ni los coches paran por temor a represalias.
“Lo que no hace la sociedad marroquí, acogedora y humana, se nos dice que lo hacen agentes uniformados, miembros de fuerzas del orden del Estado, que entran en el bosque de Beliones, no para apartar de la frontera -de una maldita frontera que Dios no hizo ni quiso ni quiere-, a unos emigrantes, sino para apropiarse de los pocos alimentos que los emigrantes han recibido para subsistir”, añade Agrelo.
Los plásticos con los que se cubren para evitar el frío también son requisados. Los asentamientos de Beliones se han convertido en un auténtico infierno para los que, al no tener ya nada, insisten en permanecer por la zona intentando el pase a Ceuta por alguna de las vías abiertas. En las visitas giradas por la Iglesia a los asentamientos se han encontrado a inmigrantes heridos, algunos por caídas al intentar saltar la valla. A dos los han terminado trasladando a Tánger para curarlos evitando que, en caso de heridas abiertas, puedan producirse infecciones.

Entradas recientes

Estos televisores se quedan sin Netflix desde el 1 de septiembre

Si la previsión meteorológica del domingo para Ceuta no acompaña y tienes planeado quedarte en…

29/08/2024

El Ceuta Femenino se impone al Ceuta cadete por un 5-3

La Agrupación Deportiva Ceuta Femenino sigue poniéndose a prueba en la pista. Esta vez, lo…

29/08/2024

La 'mili' para los reclutas comienza en Marruecos la próxima semana

En aplicación de las instrucciones dictadas por el rey de Marruecos, Mohammed VI, jefe supremo…

29/08/2024

Marruecos inicia su séptimo censo poblacional con 55.000 efectivos

Un total de 55.000 censistas, de los cuales el 37% son mujeres, participarán en el…

29/08/2024

Excursión para animar al Ceuta en su partido ante el Marbella

La afición de la Agrupación Deportiva Ceuta tiene una nueva oportunidad para disfrutar del conjunto…

29/08/2024

Retrasar la edad de jubilación aumenta el riesgo de morir antes de los 70 años

Retrasar la edad de jubilación incrementa el riesgo de morir de forma prematura, de manera…

29/08/2024