El Gobierno local no paralizará el pliego de la nueva limpieza pública

El primer grupo de la oposición en la Asamblea, la coalición Caballas, fracasó ayer en su intención de, a través de una moción de urgencia, devolver a los técnicos el pliego de condiciones que servirá para adjudicar el nuevo servicio de limpieza pública viaria y paralizar el proceso iniciado. Aróstegui repitió en sede parlamentaria que a su juicio el documento adolece de múltiples carencias como la de no dar una solución definitiva al problema de los residuos de animales, “que se perpetúa en precario”, o la de “no haber utilizado más criterio para su elaboración que el de fijar un precio [16 millones de euros anuales] y una exigencia, mantener la plantilla”.
“Deberíamos haber resuelto los problemas existentes con la maquinaría para atender las necesidades de toda la ciudad, pero en lugar de lograrlo vamos a peor”, lamentó Aróstegui, quien también advirtió de que si bien los costes de personal “están bien calculados” los de explotación “no se han valorado más allá del resumen de certificaciones de la adjudicataria actual”.
“Paralicen el pliego ahora que no conllevaría mayores problemas e introduzcamos en él nuevos parámetros de calidad como la del soterramiento de contenedores más allá de desear que todo siga como está”, pidió el localista.
“No”, le respondió el titular de Medio Ambiente, Gregorio García Castañeda, que rechazó que se deje a las barriadas o a algunas playas de lado, como denunció Caballas. “Este pliego lo han elaborado diferentes técnicos de diferentes departamentos con varias premisas: que haya un ahorro de un 15% con respecto al coste de los servicios actuales por separado, mantener los puestos de trabajo y una transparencia total en el procedimiento”, resumió. El consejero detalló que se ha recortado el número de rutas para hacerlas más largas; que la nueva adjudicataria del servicio “estará obligada a mantener los contenedores” y que sí se contemplan como servicios especiales las fiestas musulmanas.

Sanidad niega a Ali que haya playas “abandonadas”

“Un año más”, Mohamed Ali, volvió a llevar ayer al Pleno el estado de las playas y el distinto trato que, a su juicio, les dispensa el PP. El líder de Caballas denunció las “deficiencias” que se dan en arenales como los del Tarajal, San Amaro, Benítez, Calamocarro o La Almadraba y preguntó por el criterio que ha utilizado la Administración para decidir cuáles se consideran zona de baño y cuáles no, de lo que depende que Cruz Roja esté allí todos los días. El consejero de Sanidad, Abdelhakim Abdeselam negó la existencia de un “agravio comparativo” sobre un criterio político: “Se trata”, explicó, “de criterios técnicos medioambientales y sanitarios recogidos en el Real Decreto 1341/2007, pero en cualquier caso no hay ninguna playa abandonada en Ceuta”.