Por un lado, se encuentra la posibilidad de que se acometa la inversión valorada en unos cincuenta millones de euros para la instalación de un cable submarino que conecte a nuestra ciudad, desde el punto de vista eléctrico, con la Península y que de esa manera cuando se produzca cualquier tipo de avería, circunstancia de la que nunca estaremos a salvo, entonces se podría conectarse a alguna de las estaciones existentes en la Península.
Y la segunda de las líneas de trabajo está relacionada con la empresa Endesa, la cual si tiene la suficiente potencia para atender a nuestra ciudad, pero de los distintos grupos que tiene en su central de la Avenida Cañonero Dato, es lógico que algunos de ellos se encuentren apagados y nada más que se utilicen en los casos que se hace necesario poner en marcha para atender la caída de algún grupo.
El mantenerlos encendidos tiene un coste alto que desde el punto de vista de la Ciudad Autónoma, ante la situación especialísima de Ceuta y ante la tardanza de ese cable que de aprobarse su realización tardaría todavía algunos años más, sería una buena solución, que el Estado asumiera pronto.
Una coordinación a través de protocolos
Las medidas de las que hemos estado hablando son a un largo plazo porque se necesita y más en estos tiempos de crisis el dinero suficiente para sufragar los costes. Pero una tercera medida sobre la que va a trabajar la Ciudad Autónoma en relación tanto con la empresa de generación de energía como la de distribución es la realización de unas coordinaciones que están establecidas a través de protocolos para que si se produce una avería en un punto determinado de la red ello no haga que deba caerse un grupo de la planta generadora de electricidad.
Por esta razón desde la Ciudad se va a trabajar codo con codo con las dos empresas para lograr pronto cerrar este tema que puede llegar a una solución cuando se produzcan estas situaciones. Parece que está pendiente que Red Eléctrica apruebe ese protocolo, pero de momentos se pondría en marcha con la intervención de la Ciudad.
Volvemos a repetir que es la medida que en estos momentos se considera más rápida para paliar en parte los posibles cortes de energía y además hay que añadir que esas reuniones se vienen manteniendo desde hace tiempo y que ahora se intensificarán más.