El Gobierno califica de “puntuales” las algaradas con los porteadores en Tarajal

El Gobierno ha defendido la labor policial en la frontera, destacando que en los servicios llevados a cabo por las fuerzas de seguridad “en la línea fronteriza con Marruecos” se contempla “como principio básico el más estricto cumplimiento de la legalidad vigente y el máximo respeto a los derechos fundamentales de las personas”, aclara.

Con esta aseveración responde a la pregunta presentada por Izquierda Unida sobre el trato que se da a los porteadores después de los enfrentamientos entre éstos y la Policía Nacional que tuvieron lugar el pasado mes de julio. “El trato que se dispensa a los porteadores marroquíes que pretenden acceder a territorio español es el mismo que se da a cualquier ciudadano”, aclara el Gobierno.
Respecto a esos enfrentamientos, que dejaron varios heridos a uno y otro lado del paso fronterizo, se destaca que “fueron puntales y excepcionales, como consecuencia de un conflicto entre los propios porteadores que desembocaron en desórdenes que colapsaron los pasos de personas y vehículos y que terminaron con ataques, amenazas y agresiones a funcionarios policiales”, puntualiza. Se sigue la misma línea de exposición que ya puso de manifiesto en su día tanto el Ministerio de Interior como la propia Delegación del Gobierno.
En dicha respuesta el Ejecutivo defiende la labor que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado llevan a cabo en el Tarajal así como las inversiones para mejorar este punto ejecutadas por el Estado.
Así, se destaca que en el año 2013 la Secretaría de Estado de Seguridad acometió las obras de ampliación del Tarajal, consistentes en el acondicionamiento de una franja de terreno para destinarla exclusivamente a las actividades de porteo de mercancías a pie. “Todo ello con el propósito de descongestionar las actuales instalaciones del Tarajal, cancelar el paso de porteadores por el Puente de Biutz y mejorar, en definitiva, el tránsito fronterizo”, significa, en clara alusión a la puesta en marcha del ‘Tarajal II’, cuyas obras, al menos en el lado español, han finalizado.
“Todo ello”, se advierte, “sin perjuicio de que en un futuro se aborde una ampliación general de las instalaciones del Tarajal, en función de las disponibilidades presupuestarias, para lo cual se están realizando estudios previos”, añade.
Por lo que se refiere a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desplegados en Ceuta, el Gobierno destaca que ambos Cuerpos se refuerzan habitualmente en función de las necesidades operativas y cuando se considera oportuno un apoyo puntual, es decir para las operaciones que pueden afectar a la frontera como, por ejemplo, la Operación Paso del Estrecho o la Operación Minerva.