Por segundo año consecutivo, y debido a la crisis económica, las comunidades autónomas han diseñado unos presupuestos a la baja, aunque el objetivo de los gobiernos regionales ha sido mantener el gasto social y que los recortes no afecten a servicios esenciales como la sanidad o la dependencia. De los proyectos de presupuestos de las autonomías y de Ceuta y Melilla se desprende que las cuentas de 2011 se verán mermadas respecto a este año. En el caso concreto de nuestra ciudad, el descenso se cifrará en un 6,7% en relación al anterior periodo, ya que los fondos que manejará el Gobierno local se cifran en 286 millones de euros.
El descenso más acusado se cifra en Canarias y Galicia, donde la rebaja supera el 10 por ciento. Sólo las del País Vasco (cifradas en 10.549 millones de euros) suben, en concreto un 2,3 por ciento, pero si se excluyen los 472 millones de euros de las transferencias de las políticas activas de empleo y del Instituto Social de la Marina y los 275 millones que adelanta el Gobierno vasco para el AVE, el presupuesto bajaría un 2,3 por ciento, respecto a los de este año.
A pesar de que las comunidades se van a enfrentar a un ejercicio duro y ajustado, la educación, las políticas sociales, la sanidad o el fomento del empleo, serán las áreas privilegiadas, ya que casi ninguna comunidad se ha atrevido a reducir las partidas en estas materias, mientras que las inversiones en infraestructuras caen notablemente.