El buque escuela de la Armada portuguesa Creoula atracó en la jornada de ayer en nuestro puerto. A su llegada le estaban esperando mandos de la Comandancia General y el cónsul de Portugal de nuestra ciudad, José Ríos Claros, que saludaron en tierra al máximo responsable del barco, comandante Martins.
A continuación tuvieron la oportunidad de subir a bordo, donde departieron un rato antes de emprender el recorrido de visitas oficiales, entre las que se encontraba el recibimiento en el Palacio de la Asamblea por parte de la consejera de Educación, Cultura y Mujer, Mabel Deu.
Mientras tanto, los estudiantes de las Universidades de Oviendo y Oporto, que viajan todos los a bordo del buque escuela, tuvieron la oportunidad de dirigirse hasta las Murallas Reales, con un pasado portugués importante, donde recibieron una serie de explicaciones en torno a como se fueron construyendo las mismas. Todos ellos, luego eligieron el poder subir bien al Mirador de San Antonio o el de Isabel II, donde disfrutaron de las vistas de nuestra ciudad. Esta parada técnica duró hasta las siete de la tarde, emprendiendo viaje hasta Formentera, ya en los últimos días de su crucero que pondrá punto y final en Barcelona.
El Creoula había atracado en la bahía norte de Ceuta en la tarde del martes, y ninguno de sus ocupantes quisieron perder la oportunidad de fotografía el momento y las vistas que se divisaban a bordo. El programa de las dos universidades, denominado la Universidad Itinerante de la Mar (UIM) cumplía a primera hora de la mañana su objetivo de atracar en Ceuta. Lo había intentado antes en dos ocasiones, en 2007 y 2012, pero las malas condiciones meteorológicas, con fuertes vientos de Levante y oleaje que invadía la cubierta, fue suficiente para impedir que el buque-escuela en el que navega, el Creoula, cruzase el estrecho de Gibraltar dentro del horario previsto. Después de doce días de travesía, nueve en aguas portuguesas, los estudiantes españoles ya echaban en falta poder conectarse a internet. “Por lo menos para utilizar el whatsapp”, argumentaba Ana de Diego, estudiante ovetense de Medicina, sin despegarse del móvil antes de ayudar a plegar las velas.
Los nuevos estudiantes portugueses, a bordo desde el domingo, ya están totalmente integrados en las tareas de a bordo. Las guardias se han convertido en una rutina, más llevadera con los momentos de descanso. El profesor Nuño Cruz, de la Universidad de Aveiro, ofrece a los alumnos clases de yoga en la cubierta: “Es una filosofía de vida; quiero que aprendan algunos ejercicios básicos”.
Avilés
El Creoula partió el 30 de julio del puerto de Avilés y 22 días después llegará al de Barcelona. Este curso acoge a un centenar de alumnos, profesores y marinos procedentes de las universidades de Oviedo, León y Oporto. Asimismo, viajan a bordo del buque los cadetes de la Escola Naval de Portugal.
En este ecuador del viaje, de la campaña de la UIM que recorre toda la costa de la península Ibérica, el primer turno de estudiantes portugueses regresó a sus casas y fueron reemplazados por 17 nuevos instruendos. Viajan desde Lisboa hasta Barcelona, con paradas en Ceuta, Formentera y Palma de Mallorca, acompañados por los alumnos españoles que se organizan en un único grupo. Muchos de esos que el domingo dejaron el Creoula querían seguir la travesía. “Me encantaría seguir, pero no puedo. He pasado unos días fantásticos y me voy con un poco de saudade”, expresaba Filipe Cayolla, de 48 años y arquitecto de interiores. Declaraciones que hacía a El Comercio, periodico asturiano que está siguiendo todo el recorrido del barco portugués desde que partió del puerto de Avilés.
Todos los tripulantes, tanto marinos como estudiantes, se fueron encantados de las visitas, al igual que el propio comandante del buque escuela que realizaron en nuestra ciudad y de la hospitalidad que recibieron en las escasas horas en que permanecieron en nuestro puerto.
Una jornada muy intensa
1Atraque. A primera hora de la mañana el barco estaba atracando en el puerto de Ceuta, después de haber fondeado en la bahí norte la noche anterior. Les esperaban responsables de la Comandancia General y el cónsul de Portugal en nuestra ciudad.
2 - Recibimiento. Tanto la tripulación como los estudiantes que viajan a bordo del barco formaban en cubierto, mientras se hacían las maniobras en el Muelle de España. El comandante Martins bajó para saludar a las autoridades y luego les invito a subir a bordo.
3 - Visitas. Mientras que el comandante, acompañado por el cónsul iniciaba el recorrido para saludar a las autoridades, tripulantes y alumnos se dirigián a las Murallas Reales, donde recibieron explicaciones sobre su construcción en sus distintas fases y posteriormente subieron a los miradores.
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