Dragados deberá decidir si sigue con las obras de la antigua estación

Nuevamente la paralización de estas obras enfrenta al Gobierno con Caballas.

A partir que el Gobierno autonómico envíe al Consejo de Estado el expediente abierto por la petición de 600.000 euros, solicitados por Dragados, por los daños causados a la empresa por el tiempo que lleva paralizada la obra de la antigua estación de ferrocarril, la empresa deberá decidir si reanuda o no estos trabajos, como en su día prometió a la consejera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Susana Román.
Nuevamente, la paralización de estas obras llegó a un pleno de la Asamblea, a través de una interpelación realizada por Caballas, a través de Juan Luis Aróstegui. El portavoz de este grupo político sentenció que el pasado mes de diciembre, seis meses después de que el Gobierno anunciara que iba a encontrar una solución definitiva a esta inversión, presentaron una pregunta. Recordó que la consejera, en ese momento, le dijo que habían estado en Sevilla y que para el mes de enero tendría una solución definitiva. Le recriminó que estaba finalizando junio y que no se sabía nada de nada. Insistió en que le había recomendado al Gobierno que debía haber finiquitado el contrato con Dragados y licitarlo de nuevo. Además, les acusó de que “están jugueteando con Dragados. Esta empresa tiene ahora más abogados que albañiles y lo único que les interesa es el dinero. A ellos les importa muy poco que la obra parezca un verdadero estercolero”.
Susana Román volvió a explicar como se encontraban los tres expedientes abiertos por la Ciudad en función de las peticiones de Dragados. El primero de ellos consistía en una revisión de precios que debió ser informada por el arquitecto director de la obra que es un gabinete de arquitectos que se encuentra en Madrid. Sobre este particular han existido varios escritos desde el Negociado de Contratación a este estudio y ya tienen la respuesta definitiva.
Luego, una certificación de 47.000 euros que les fue detraída cuando la Ciudad abonó los débitos que tenía con Dragados dentro del expediente de pago a los proveedores. En este punto concreto, el interventor ha dado su opinión al respecto y les ha reconocido una parte.
Y el verdadero conflicto se encontraba en la petición de 600.000 euros por los daños causados por estos años de paralización. Ha sido el más voluminoso de los expedientes y en este punto concreto, lo único que se le reconoce desde la Ciudad con 28.000 euros.
Ahora, este informe que se finalizó el pasado 20 de junio debe ser remitido a Dragados y, luego de manera directa al Consejo de Estado.
Para la misma Román, si hubieran tomado la decisión propuesta por Caballas de rescindir el contrato con Dragados, “nos encontraríamos en esta misma situación y sin haberlo podido licitar, ya que no tendríamos más remedio que haber analizado todas estas peticiones con la empresa antes de rescindir con ellos la relación contractual que nos une”. 

LAS CLAVES

Primera petición
Revisión de precios solicitada
Dragados pidió una revisión de precios. Por esta razón, desde el Negociado de Contratación se envió una carta al gabinete de arquitectos que es responsable de la dirección de obra. El mismo contestó y se les volvió a pedir una aclaración que fue efectuada en esta relación epistolar con los mismos.

Segunda petición
Les fue denegada una cantidad por Intervención
Cuando la Ciudad Autónoma abonó a Dragados la parte que tenía pendiente por la realización de la obra, dentro del ya conocido como Programa de pago a proveedores, desde Intervención se les retiró un pago de 47.000 euros que no se consideraba oportuno. Esta cantidad ha sido reclamada por la sociedad y la misma Intervención ha emitido un informe sobre el mismo.

Tercera petición
600.000 euros por los daños con la paralización
Era la cantidad más importante solicitada por Dragados a la Ciudad Autónoma dentro de las negociaciones que se mantienen para la reanudación o no de los trabajos en la antigua estación de ferrocarril. Pues bien, sobre este punto concreto señalar que ambas partes quedaron que se someterían a la opinión que sobre este expediente tuviera el Consejo de Estado. Por parte de la Ciudad ya se ha terminado su informe, el cual ha sido remitido a Dragados para su conocimiento. Nada más que queda el enviarlo al Consejo de Estado para que en el plazo de dos o tres meses haya una decisión definitiva.