En la madrugada del pasado lunes, dos agentes lograron reducir y arrestar a una mujer de 39 años que estaba siendo víctima de un brote psicótico por el que ya estaba siendo tratada.
Los policías nacionales tuvieron que arriesgarse y tratar de arrebatarle de las manos un destornillador, un martillo de carpintero y un cuchillo de grandes dimensiones con el que fueron amenazados de muerte por parte de la mujer. Su marido y su hija fueron los que alertaron a las autoridades. Él tuvo que ser atendido de varios cortes en los brazos, uno de ellos de especial profundidad, según informaron a El Faro fuentes policiales.
Los hechos sucedieron en torno a la 01:00 horas del pasado lunes en la avenida Ejército Español, entre el Zurrón y el Mixto. Los agentes acudieron al domicilio y hallaron a la mujer, después detenida, en salón de la vivienda gritando “Que os voy a matar. Acercaros que os corto el cuello”. Al otro lado de la estancia estaba el marido, con varios cortes en los brazos, y la hija del matrimonio, llorando. Los agentes procedieron a llevarse a ambos a la cocina para evitar que fueran agredidos por la mujer, que seguía “muy alterada” y con una actitud cada vez más “violenta”. Con sus ‘armas’ en ambas manos, amenazaba a los agentes actuantes haciendo “aspavientos y varios intentos de apuñalamiento”, indicaron las mismas fuentes.
“Os voy a matar como os acerquéis”, continuó gritando la detenida a los agentes, mientras éstos trataron de dialogar con ella, calmarla y en un momento de descuido quitarle el cuchillo de la mano.
Dos veces en el mismo día
La mujer al percatarse de las intenciones de los agentes, se puso el cuchillo en el cuello y espetó a los policías: “Os mato y yo me mato. No os acerquéis que os mato”. Finalmente, los agentes se avalanzaron sobre ella, le quitaron el cuchillo y los tres cayeron encima del sofá. Al tratar de proceder a la detención de la mujer, ésta ofreció resistencia e intentó golpear a los agentes con el martillo que portaba aún en la mano izquierda, señalaron fuentes policiales a este diario.
Los policías llamaron a una ambulancia para que asistiera a la detenida por una crisis de ansiedad. Una vez que los sanitarios llegaron al domicilio, informaron a los agentes de que horas antes habían asistido a la misma mujer, pues estaba atravesando un brote psicótico.
Una vez todos en la Jefatura, el marido, que había sido atendido en el Hospital Universitario de sus cortes, explicó a los agentes que su esposa está bajo un tratamiento psiquiátrico.