Dos insignias marineras y leales

El presidente de la Ciudad y el capitán de navío destacaron las similitudes entre Ceuta y el buque escuela, que son “muy marineros y muy leales” y comparten “esencia, identidad y carácter”. El ‘Elcano’ continuará hoy su ruta marítima

“Desde el trocito de España que es el ‘Juan Sebastián de Elcano’ a este otro trozo de España que es Ceuta, tan marineros, tan leales los dos, con todo el afecto y agradecimiento por tan maravillosa acogida”. Esta es la dedicatoria que el comandante del buque, el capitán de navío Enrique Torres Piñeyro, dejó escrita en el Libro de Oro de la Ciudad Autónoma de Ceuta a mediodía de ayer en la recepción oficial.
Seguidamente, la tripulación del buque-emblema de la Armada subió al Salón del Trono, donde Torres Piñeyro tomó la palabra para agradecer la acogida y decir que esta “breve pero muy intensa” visita “estaba pendiente desde hace muchos años” y ahora han tenido la oportunidad de materializarla con el inicio del LXXXVI Crucero de Instrucción, que tendrá una duración de más de seis meses.
Torres Piñeyro manifestó que han comenzado el crucero “con muchísima ilusión” y que su dotación y él van a poner todo su esfuerzo para “contribuir a la formación humana, social, militar y marinera” de los alumnos y, además, ser “dignos representantes de España” en los puertos a los que arriben.
El capitán de navío dijo que los alumnos saben que, como marinos que son y como oficiales de la Armada que serán en el futuro, lo fundamental es “aprender a conocer y a entender la mar; a veces a sufrirla, a veces a dominarla, pero al final siempre a terminar por sentirla y quererla, porque al fin y al cabo es el medio en el que tenemos que hacer nuestro trabajo”.
Torres Piñeyro manifestó también que tal y como dijo el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, en su visita a bordo, hay cierto paralelismo entre el ‘Juan Sebastián de Elcano’ y Ceuta: que son “muy marineros y muy leales”, insistió.
Por su parte, el jefe del Ejecutivo local recordó que este buque estuvo por primera vez en Ceuta en 1953 y después regresó en 1978. Esta es la tercera vez que hace escala en el puerto ceutí. Afirmo también que la Armada y Ceuta comparten “esencia, identidad y carácter”, por lo que esta visita supone “una apelación a los sentimientos y al corazón”, ya que “Ceuta y la Armada tienen una misma divisa, el amor a España, y un mismo carácter, el marinero”.
Del buque, dijo que “es escuela para navegantes” pero también para “caminar y navegar por la vida”, algo muy necesario.  “En el buque escuela se aprende a compartir, y eso también es importante para la vida; a capear los temporales a base de espíritu, de sacrificio, de solidaridad, del sentido del deber y de disciplina; y también a conocer mundo, y eso significa también una manera de entender que la diversidad, las realidades aparentemente desconocidas, en vez de ser motivo de enfrentamiento y confrontación, son un vehículo para el enriquecimiento”. El máximo representante de la Administración local afirmó que el buque y Ceuta comparten tres atributos: atractivo, joven y amable.
El jefe del Ejecutivo recordó también que en la primera vuelta al mundo que realizó este histórico bergantín-goleta, entre 1928 y 1929, viajaba a bordo un ceutí, Cristóbal Serrán, padre del artista Ginés Serrán Pagán. El libro redactado por este último basado en el diario con recuerdos de su padre, recortes de prensa y fotografías, fue entregado por Vivas al comandante el pasado domingo. Su título es La memoria del viento.
Durante su escala en la ciudad autónoma, la tripulación del buque ha podido conocer Ceuta y hoy ya serán despedidos por la Nuba del GRC-54 en el Muelle España.

Numerosas visitas al barco-emblema de la Armada

Han sido muchos los ceutíes que entre el pasado domingo y ayer subieron a bordo del barco-emblema de la Armada Española. Numerosas visitas en las que los caballas han vivido un momento inolvidable y se han sentido privilegiados de subir a cubierta de un buque que la última vez que visitó Ceuta fue en el año 1978. Entre los visitantes había incluso un ceutí que hizo el servicio militar entre 1959 y 1960 a bordo del ‘Juan Sebastián de Elcano’, José Fuentes, y cuya historia fue publicada ayer por este medio. Los ceutíes han vuelto a abrazar a una insignia de la Armada, como ya lo hicieron con el ‘Juan Carlos I’ y el ‘Camino Español’.

Un personaje histórico a bordo del ‘Elcano’ llamado ‘Ceuta’: el marinero Cristóbal Serrán (Por Ginés Serrán Pagán)

Ha llegado a Ceuta el buque escuela de la Armada Española, ‘Juan Sebastián Elcano’. Dos entrañables amigos , Higinio Molina López y Paco Sánchez Montoya me han enviado un artículo publicado en El Faro de Ceuta y fotos que se han mostrado en RTVCE, recordando el diario que escribió mi padre sobre la primera vuelta al mundo que realizó el insigne buque escuela en 1928-1929 y recordando el libro que publiqué sobre el Diario titulado La Memoria del Viento. Gracias , Paco e Higinio por vuestro bonito y cariñoso trabajo.  
Cuando mi padre escribió el Diario a bordo del buque tenía tan sólo 21 años. Era el ayudante del Segundo Comandante. Durante los 303 días que duró el viaje, el marinero Cristóbal Serrán  Ortiz vivió la experiencia más apasionante de su vida. De niño yo le pedía que me contara sobre sus aventuras en Australia, el ciclón en el Pacífico , los caníbales de Fiji, los rascacielos de Nueva York... En sus memorias e historias yo navegaba con él y con su maravilloso buque una y mil veces por todos los mares ... Y soñaba en que algún día cuando fuera mayor podría convertir mi vida en un largo viaje que no terminara nunca ...
De los 237 miembros que formaban la tripulación fue el único que ha legado a España un Diario . Es actualmente el único documento histórico que se conserva de este primer viaje alrededor del mundo del buque escuela ‘Juan Sebastián Elcano’.  Fue un hombre generoso, sencillo y bueno ... Era la negación de la vanidad y de la envidia . Demostró con su Diario que desde muy joven fue un genio. España y Ceuta todavía le deben un homenaje. Su mayor alegría era su familia. Su gran pasión, el mar. Ha sido y sigue siendo la gran influencia de mi vida.  A bordo , en el buque escuela , durante la travesía alrededor del mundo, nadie lo conocía como Cristóbal; lo llamaban ‘Ceuta’.