Categorías: Opinión

Dos clases de tontos

En algún sitio alguien ha escrito que “hay dos clases de tontos. En primer lugar, los de la cabeza, para los que la medicina ha logrado importantes remedios. Y luego, los del culo, para estos no hay remedio alguno: gozan revolcándose en el fango”. A este respecto parece que nos ha visitado un ejemplar de este último grupo, de los del tonto del culo. Se trataría de Melanie Gärtner, directora de documentales, que nos ha dejado una perla cultivada en forma de declaración a la prensa. Según recoge la periodista López Cortina, “Durante su trabajo con ellos, Gärtner reconoce haber aprendido muchas cosas pero aún no le queda claro para qué sirven las fronteras ni quién decide y por qué, cómo debe o puede vivir la gente”. ¡Bingo! Y se queda tan satisfecha después de haber evacuado tan filosóficos y profundos pensamientos. Supongo que esta señora tampoco tendrá claro para qué sirve la puerta de su casa. Supongo, también, que la habrá quitado y habrá puesto en su lugar una cortina. Asimismo, se estará preguntado quién decide cómo ha de vivir ella. ¡Y que este personaje haya pasado por una universidad! La Gärtner ha venido a Ceuta a impartir doctrina a seres incultos, zafios, toscos, como, al parecer, somos los ceutíes. Se ve que la Gärtner se ha gustado mientras le hacían la entrevista y se ha venido arriba sentando cátedra sobre inmigración, fronteras y demás parafernalias y nos ha dejado sentencias, que pasarán a los anales, productos de su cerebro encharcado y enfangado con consignas multiculturalistas, esa ideología  cancerígena que, disfrazada de progreso, caridad, fraternidad, justicia social, igualdad, etcétera, se trata en realidad de un plan criminal y despiadado para laminar la cultura de los países europeos. Consiste, sin más preámbulos, en un plan de ingeniería social para acabar con los especímenes autóctonos europeos.
No se puede negar que mediante la violencia puede desorganizarse, quebrarse, una sociedad y que esta inmigración masiva es a todas luces la mayor violencia que ha sufrido Europa en mucho tiempo. Aquí se han cantado las excelencias de la diversidad, de las sociedades muy heterogéneas, de lo multicultural, en suma, pero todo ello predicado respecto de las sociedades europeas, nunca de los pueblos africanos, arabo-musulmanes, asiáticos o negros. Para ellos su identidad es la base sobre la que se asientan sus sociedades y ha de ser, por consiguiente, inmutable. En cambio, sí se debe abrir las fronteras europeas a esa inmigración masiva con lo que se pretende un ‘genocidio por sustitución’ –con la ayuda inestimable de la casta política europea–, la suplantación de unos pueblos europeos por otros no europeos y extraños a la europeidad. De tal manera que los europeos, lentamente, pero sin pausa, se encuentran con que se han convertido en extraños en sus propios países. Todo ello con el silencio de la prensa vendida al sistema y de las ONGs que alientan esta criminal inmigración masiva. ¿Cómo ha llegado a pasar todo esto? Pues porque parece que el ciudadano está encantado con que le engañen y se ha vuelto perezoso para encarar y enfrentar este proceso destructivo y maligo del multiculturalismo. Traga con carros y carretas. Se ha convertido en una masa lanar a la que le falta poco para balar. Es una masa estúpida y bovina. Si el panorama con la inmigración masiva que hemos recibido es desolador, ¿cómo será dentro de 30 o 40 años? Téngase en cuenta que este discurso multiculturalista no nos va a salir gratis.
A los europeos se les ha ido destilando gota a gota, desde la cuna a la sepultura, esa ideología ponzoñosa y criminal llamada multiculturalismo de que han de odiar todo aquello que los caracteriza, como historia, cultura, identidad, religión, en beneficio de la cultura, identidad y religión de los individuos que asaltan sus países con el ánimo de laminar lo que allí encuentran y suplantarlo por lo que ellos traen. Así, cuando los negros defienden su identidad, se le llama orgullo; cuando los indios defienden su identidad, se le llama cultura; cuando los asiáticos defienden su identidad, se le llama tradición; cuando los judíos defienden su identidad, se le llama historia; pero cuando los europeos-blancos defienden su identidad, se le llama racismo. Evidentemente, a estos últimos se les aplica tendenciosamente otro rasero.
Así, los predicadores de esta perversa ideología, que es el multiculturalismo, sostienen hasta la lágrima que nuestras sociedades europeas hasta ahora monoétnicas y homogéneas en lo cultural y en lo racial son “sociedades imperfectas” y para subsanar esos defectos hay que abrir las fronteras a la inmigración masiva para convertirlas, pienso yo, en “sociedades perfectas”. Pero, repito, las sociedades asiáticas (china, japonesa, vietnamita, indonesia, tailandesa, coreana, afgana, pakistaní, etcétera), las sociedades arabo-islámicas (marroquí, argelina, tunecina, egipcia, libia, saudí, iraquí, iraní, siria, mauritana, etcétera) o las sociedades de países africanos negros (ghanesa, marfileña, congoleña, chadiana, nigeriana, camerunesa, etcétera), esas sociedades, homogéneas en lo cultural, racial y religioso, según estos predicadores del multiculturalismo no necesitan abrir sus fronteras a la diversidad. ¿Por qué? ¿Por qué se pretende entonces la muerte de la cultura europea autóctona, su modo de vida, su mentalidad, sus valores ancestrales, su espíritu, su historia, su religión, todo ello sumergido en una marea multirracial, multiétnica y multicultural, cuando tales barbaridades no se predican de esas otras sociedades? ¿A quién beneficia? A los europeos no, por supuesto. Así, de este modo, los pueblos europeos caminan ineluctablemente hacia su propia desaparición, debido al tamaño de las poblaciones foráneas que se están asentando en el seno de las sociedades europeas. Toda una amenaza. Se trataría de la caída de Occidente en honor de la multiculturalidad y la hermandad universal con la ayuda de la traidora casta política, de la prensa vendida al sistema, de ONGs, y, por lo visto, de los tontos del culo.

Entradas recientes

Ceuta destaca en la Conferencia Sectorial de Cultura por el reconocimiento de los derechos culturales

La consejera de Educación, Cultura y Juventud, Pilar Orozco, ha participado hoy en la Conferencia…

17/10/2024

Reconocimientos por el Día de la Delegación de Defensa en Ceuta

El Salón del Trono del Cuartel General de la Comandancia General de Ceuta ha acogido…

17/10/2024

Macrojuicio blanqueo de capitales: ¿hubo tráfico de drogas?

La investigación que desarrolló la Guardia Civil de Ceuta con apoyo de OCON-SUR durante año…

17/10/2024

El bombero Juan Antonio Moya, presente en los Juegos Olímpicos de Braga

Esta semana ha comenzado los Juegos Olímpicos para Bomberos, Policías y Militares que se están…

17/10/2024

Aena licita el mobiliario para la ampliación de la terminal del helipuerto

Aena ha sacado a licitación, por un importe neto de 74.149,99 euros, el mobiliario para…

17/10/2024

AUGC denuncia la "insuficiente" subida en la mutualidad del ISFAS

El Consejo de Ministros aprobó el pasado 9 de octubre la celebración del concierto del Instituto…

17/10/2024