Domínguez: “Parece que como la curva está bajando estamos bien, pero seguimos en situación de riesgo”

El jefe de Medicina Preventiva del Hospital Universitario de Ceuta, Julián Domínguez, ha alertado este lunes de que aunque “parece que como la curva está bajando nos da la impresión de que estamos bien”, pero lo cierto es que “seguimos en situación de riesgo extremo y no podemos bajar las medidas restrictivas” en alusión a la posible apertura de medidas que podría darse de cara a la Semana Santa.

“Lo que pasa es que abrimos todo muy pronto y volveremos a tener una cuarta onda epidémica y todas las que vengan hasta que no haya una inmunización generalizada. Tuvimos 1.511 casos desde el 26 de diciembre en la tercera onda epidémica y 2.800 en la segunda. La vida humana vale más que otras cuestiones económicas. Mi obligación es decir que no se levanten restricciones hasta que lleguemos a los 25 casos por cien mil habitantes. Únicamente lo que podría haber es un levantamiento de horarios en determinadas actividades que no impliquen interacción social. No hay otra recomendación que dar hasta que tengamos vacunada a la población. Si volvemos a hacer lo mismo, en Semana Santa volveremos a una cuarta ola”, ha aseverado Domínguez.

En este sentido, el jefe de Medicina Preventiva ha insistido en que cuando se produce una elevación de la incidencia de virus, “detrás viene el aumento de la ocupación hospitalaria y el fallecimiento de los pacientes más críticos unas dos semanas después de los picos”, por lo que ha destacado que si la incidencia continúa bajando, “la presión hospitalaria bajará”.

“En mitad de diciembre o así estábamos a 0, del 26 al 28, incluso primeros días de enero, estábamos con ocupación cero. Se redujo la incidencia a 86 casos entre el 25 y 26. En la ocupación hospitalaria y de UCI, la caída fue enorme. Pero ese poco que se abrieron las medidas, sirvió para una tercera ola. Es una pena que estemos pensando en volver a abrir otra vez pues la mortalidad en esta tercera ola no ha sido tanto como en la segunda. Pero nos falta la mitad de la caída de la curva y hay pacientes en UCI y en planta que están bastante mal. Tenemos que pensar que podíamos haber evitado el fallecimiento de esas personas”, ha continuado.

De esta manera, la consecuencia “directa” de la reducción del volumen de pacientes trasmisibles, infectados y los que están desarrollando la enfermedad y asintomáticos, es que “se reduce esa incidencia”, tras lo que ha aseverado que si se hubieran aumentado las restricciones de cara la Navidad la incidencia menor hubiera sido menor. “Las cifras eran buenas e indicaban que se podía esperar para endurecer las restricciones. Los informes que se daban ya aventurábamos que la transmisión sostenida subiría y la toma de decisiones debería se haber sido automática en los primeros días de enero. Probablemente hubiéramos frenado esa subida de casos muy a principios de enero. Pero como se abrieron las restricciones, subimos a los 400 por cien mil sobre el 13 de enero”.

No levantar restricciones es la estrategia a seguir

De ahí que de cara a las próximas semanas, Domínguez apueste por “seguir las recomendaciones de los técnicos”, que deben ser las de la OMS, Europa y el Ministerio de Sanidad y es que “no se bajen ni se quiten las medidas restrictivas hasta que bajemos a datos que indiquen cierta normalidad”.

“Volver a las medidas que indican la alerta 3, mejorar y aumentar horarios en cualquier actividad, permitir las que no impliquen mucha distancia social y que se desarrollen con ventilación a partir de menos de 150 por cien mil. Se puede mejorar la movilidad también y pasar a una situación que sería casi 25 o 50 por cien mil. Eso, sería tener menos de 7 casos al día, 49 a la semana. En este momento hemos entrado en la última semana en 16 casos diarios de media. La predicción es muy buena. Hemos bajado desde el 2 de febrero un 52 por ciento en casos y 48 por ciento en incidencia. Pero aún así no deberíamos quitar restricciones hasta los 150 por cien mil y una normalidad hasta que haya 25 casos por cien mil”, ha proseguido.

Sobre la Semana Santa, Juliá Domínguez ha recalcado que “ya lo hemos vivido tres veces, en verano, otoño y Navidad” y que “hay una prisa enorme por tener un levantamiento de las restricciones”, algo que “es comprensible ya que la gente está harta y cansada”, pero que “no podemos abrirlo todo ha que lleguemos a 25 por cien mil casos”.

Una "subida enorme" los viernes en movilidad exterior

Por otra parte, el jefe de Medicina Preventiva se mostrado sorprendido por la alta movilidad interior que hay en Ceuta. “Casi estamos con datos parecidos al año pasado en movilidad interior con un 70%, estaríamos en el límite para aumentar la mortalidad según un estudio de la Universidad de Barcelona. La movilidad interior no deja de ser elevadísima en Ceuta. En la movilidad exterior ha habido una reducción importante, pero que se corta los viernes, donde pega una subida enorme”.

Finalmente, sobre la vacunación en Ceuta, Domínguez ha explicado que “nos queda mucho” y “falta que lleguen muchas más vacunas” ya que lo ideal es que “al menos pudiéramos poner 5.000 mensuales”. “Con 10.000 mensuales casi a final de año podríamos tener una inmunidad de grupo”, ha concluido.