Para Julián Domínguez, jefe de Medicina Preventiva, la situación no mejora, el descenso es lento y el futuro, al menos visto por ahora, no es optimista. "Tenemos cifras altísimas", ha recordado, criticando con ello que las medidas domiciliarias no se están haciendo bien, aquellas que son claves para detener al virus haciendo una correcta cuarentena y aislamiento en casa. "Estamos teniendo más casos cercanos, algún brote social o laboral sigue aumentando", ha añadido, desvelando que uno de los brotes activos acumula los 50 casos en todas sus ramificaciones -"nivel familiar, social, laboral..."- y en este caso se origina "en un sitio en el se da formación relacionado con los deportes". Domínguez ha comentado que la situación de
la pandemia el coronavirus es de tendencia a la baja, pero sin grandes alardes, por debajo del descenso en España, y ha destacado que la situación en Ceuta sigue siendo delicada, con una ocupación de camas en UCI "muy elevada" y respecto a camas hospitalarias "estabilizada, pero con la cifra aún alta". Con ello, dice que "esto no concuerda con tomar ningún tipo de medidas de desescalada hasta que no bajemos a menos de 150 de tasa (por 100.000), se podría tomar alguna medida de movilidad" ha comentado, recalcando que para que haya "interacción social por menos de 50 por 100.0000", que es "cuando se podría hablar con normalidad". La incidencia acumulada, ha comentado Domínguez, está bajando en los últimos 15 días, pero en la de los últimos siete se mantiene. "La razón son casos secundarios transmitidos sobre todo por cosas familiares", ha detallado, para explicar que, a cifra de este domingo por la noche, se contaba con 96 brotes en toda la ciudad.
La cepa británica será la dominante en "uno o dos meses"
Sobre
la cepa británica, el jefe de Medicina Preventiva ha sido claro: en uno o dos meses, esta mutación del virus será la mayoritaria. En Ceuta, donde la semana pasada se registró el primer caso (el de un fallecido en enero), "hay varios casos sospechosos en estudio desde diciembre y cada semana mandamos las pruebas, es una vigilancia continua". Esta cepa "irá ocupando el espacio de la otra", la que tuvimos desde marzo, y esta nueva mutación "se adapta mejor al receptor, a su zona de dominio, con lo que se adapta al ser humano", ha añadido Domínguez. "En un breve plazo de 1-2 meses ocupará todas las infecciones desplazando a la otra inicial variante", ha asegurado. Ante esto, lo "único que se puede hacer es extremar aún más las medidas de contención e higiene", aunque Domínguez ha sido pesimista, ya que estos mensajes de responsabilidad ha considerado que no se cumplen. "No parece que seamos capaces de transmitir a la gente de que debe usar la mascarilla en todo el momento, por ejemplo como cuando dejas de comer". Para Domínguez, "era esperable" la aparición de la cepa británica en Ceuta.
Los umbrales para cerrar la actividad no esencial, "una barbaridad"
Muy crítico ha sido Domínguez por
los umbrales establecidos por la Ciudad para el cierre de las actividades no esenciales. Los ha tildado de "dar una sensación de falsa seguridad" y de "barbaridad". "Me parecen que es como si te tiraras un salvavidas cuando estas diez metros debajo del agua", ha dicho como símil. Para él, las cifras puestas para tomar esas medidas más 'duras' son "elevadísimas", como "querer tomar una serie de cifras para justificar que cuando se está muy muy elevado se toman medidas drásticas". "Otra cosa es que esto a nivel político le venga bien a aquellas entidades, sociedad, personas, a la política de Ceuta... que eso les venga bien. Pero esto es una barbaridad", ha añadido.
Férrea defensa de la vacunación de Jesús Lopera
Sobre
la polémica de la vacunación de Jesús Lopera, director territorial del Ingesa, Domínguez ha hecho una férrea defensa de ello, de que se han cumplido los protocolos que en ese momento había, cambiados posteriormente. En ese momento, ha dicho, estaba justificada y bien hecha la vacunación, porque así lo indicaban las normas. Ahora, en cambio, y tras la modificación de los protocolos, no se podría vacunar a Lopera ni otros profesionales del Ingesa. "El riesgo era estar trabajando en el
Hospital o cualquier centro sanitario. Por eso para cualquier trabajador se podía vacunar, desde el ultimo asistente voluntario hasta el directivo mas alto que estuviera centro sanitario", ha explicado Julián Domínguez sobre esto.
Más optimista con la vacunación "si llegan más dosis"
Respecto a la vacunación, Domínguez ha sido más optimista que la anterior semana sobre tener un alto porcentaje de vacunación en verano, pero para eso "deberían llegarnos unas 10.000 vacunas por mes", cuando ahora son unas 5.000, aunque se ha mostrado esperanzado por si en marzo o abril llegan más. "Si fuera 10.000 vacunas por mes, en verano podríamos estar muy bien, pensamos en eliminar restricciones, llegar a la inmunidad de grupo. De momento no veo ese número de vacunas", ha comentado. Por su parte, Domínguez ha vuelto a criticar que las medidas se tomen cuando ya estamos en datos muy altos, pidiendo que las medidas drásticas se tomen desde un inicio, aguantarlas cuando haya pocos casos, porque así la salida después es más satisfactoria. Ha pedido no repetir el "error" de la Navidad con la Semana Santa, aunque "somos capaces de tropezar indefinidamente en la misma piedra" y ha criticado que la Navidad se salvó, sí, "pero nos ha costado disgustos y la salvamos con 15 muertos" en nuestra ciudad.