El diputado despistado y la profesión de riesgo

El mes de octubre ha sido un mes muy movido en lo que se refiere al debate sobre la jubilación voluntaria anticipada de policías nacionales y guardias civiles, además de la tan reclamada equiparación salarial.

Unas reivindicaciones que van de mano en mano de los distintos grupos políticos, como una pelota difícil de digerir, mientras los componentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado seguimos sufriendo esta discriminación injusta.

El titular dice mucho de lo que vengo a comentar: “EL DIPUTADO DESPISTADO”, aunque más que despistado sería desinformado, lo que me parece una falta de respeto imperdonable de un representante político que tiene la obligación de conocer lo que se discute, porque de él o de ellos depende la posibilidad de mejorar las condiciones laborales y sociales no solo de los guardias civiles, también de los ciudadanos cuando se trata de problemas que nos afecten.

Pues bien, el pasado 3 de octubre, el Grupo Parlamentario Popular en Andalucía presentó una iniciativa para aprobar la jubilación voluntaria de guardias civiles, policías, funcionarios de prisiones y vigilancia aduanera, en la que participó el diputado Gerardo Sánchez, manifestando en el Parlamento que las retribuciones de los guardias civiles y policías nacionales recién salidos de la academia son de 2.203 euros y, posteriormente, dijo que “hoy, con un Gobierno progresista”, ganan nada menos que 2.974 euros.

Unas cifras muy alejadas de la realidad y que entendemos fueron fruto de una nota mal cogida o de una muy mala información sobre las retribuciones de los guardias civiles y policías.

Por otro lado, el pasado día 16, el Congreso votó a favor de legislar para mejorar la jubilación de policías y guardias civiles en comparación con los policías autónomos y locales. Lo que se trata es de considerar a los guardias civiles y policías profesión de riesgo, algo que no tenemos reconocido. Pero de qué se trata esto y en qué consiste es donde debemos insistir, porque no solo los diputados se despistan, también los guardias y policías que hablan sobre el tema, pero desconocen en qué consiste la iniciativa.

“No hay que despistarse, pero ya contamos que el Gobierno está dispuesto a abrir un grupo de trabajo para valorar este tema y los guardias civiles y policías apremiamos para que esto ocurra”

Pues bien, para los guardias y policías despistados o desinformados, que los hay, esta iniciativa consiste en que los guardias y policías nos podamos ir con las retribuciones íntegras del grupo C1, pero para ello, deberíamos cotizar 35 años en ese grupo retributivo, que en la actualidad es imposible para los más veteranos porque somos del grupo C1 a partir de 1996 y por tanto, hasta el año 2031 ningún guardia se puede ir cumpliendo 35 años cotizados en ese grupo.

Dicho esto, para que los guardias y policías puedan jubilarse antes con una mejor pensión deben considerarse Profesión de Riesgo, al sumarle a cada año de servicio 0,2 años por ser profesión de riesgo y, por tanto, si se aprobara en 2025, muchos guardias y policías se podrían jubilar con la pensión del grupo C1 sin esperar al 2031, año en el que se daría esa circunstancia para todos los guardias civiles y policías, que tengan entre los años de servicios y el índice corrector de 0,2 las suma de 35 años de servicio.

En cuanto a los ingresos por jubilación del grupo C1 estaríamos hablando en 2024 de 2.155 euros en 14 pagas, es decir unas retribuciones anuales de 30.170,49 euros.

Sin embargo, aunque parece fácil, para ello el Estado debe aportar una cantidad por determinar a la Seguridad Social y de esta manera compensar lo no aportado a la caja única por los miembros de clases pasivas.

En fin, no hay que despistarse, pero ya contamos que el Gobierno está dispuesto a abrir un grupo de trabajo para valorar este tema y los guardias civiles y policías apremiamos para que esto ocurra, porque cada día que pase se cometerá una injusticia con los guardias civiles y policías.