Digmun celebró el tercer Certamen de Mujeres Luchadoras en la tarde del jueves con las participantes del proyecto Alfaiguálate en el restaurante Bahía Club de Ceuta (antiguo Rigoletto), donde se premió a cuatro de las alumnas por su esfuerzo y constancia diarias.
El motivo de la cita fue celebrar el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, con el objetivo de alzar la voz públicamente. También recordaron los logros ya conseguidos por muchas mujeres alrededor del mundo que han luchado para que hoy disfrutemos de los derechos que consiguieron. Son muchas las razones que avivaron la lucha feminista cuando rememoraban lo que queda por conquistar y sobre todo a mujeres mujeres extranjeras, mujeres de otra cultura.
Durante el evento las asistentes pusieron varios temas sobre la mesa. Comenzaron por la situación que tacharon de “indigna” que viven en la frontera del Tarajal que separa Ceuta de Marruecos, soportando colas largas y todo tipo de agresiones. Recalcaron que muchas veces se sienten tratadas como animales o personas de segunda clase.
Siguieron con el reto de conseguir un trabajo digno donde se les respete y se les reconozca con un salario justo. E hicieron especial hincapié en la seguridad laboral. Después pidieron que se les valore el esfuerzo tan grande diario por venir a trabajar a Ceuta cruzando la frontera. Que son ellas las que cocinan y limpian, y que en definitiva, hacen posible que las mujeres ceutíes trabajen mientras ellas cuidan de sus familias y casas. No se olvidaron de reivindicar un acceso a la sanidad y una educación reglada que les permita progresar y desarrollarse como personas
En definitiva, manifestaron su deseo por conseguir un trabajo y un trato digno, y ser tratadas como personas. Alzaron la voz por todas las mujeres, pero especialmente por las migrantes, las sin papeles, las que sufren todos los días las consecuencias de una frontera inestable. Seguirán luchando todas juntas por mejorar su situación.